Mercedes Ros, vicepresidente de Legales y Asuntos Corporativos de Overactive
Es de las personas que se “engancha” en las conversaciones, discute y pide argumentos. Ese rasgo de su personalidad la llevó a pensar que quería estudiar Ciencias Políticas, pero imaginó que el campo laboral era muy limitado, así que decidió inclinarse por el Derecho. Una decisión que nació por descartar otra, finalmente la terminó fascinando. Encontró en el Derecho una carrera que le permitía trabajar y, al mismo tiempo, profundizar en las áreas políticas que le interesaban.
Recuerda que de niña soñaba con ser bailarina, camino que se abrió a otros rubros muy diferentes. Su primer trabajo fue a los 18 años recién cumplidos, en el call center de Banco Itaú (ex Bank Boston), sitio que recuerda con mucho cariño y del cual aún no olvida el speech.
Mercedes Ros ingresó a Overactive hace tres meses, pero conoce al CEO y fundador, Martín Troisi, hace 20 años. “Vi nacer la empresa en 2008 y siempre admiré su iniciativa, su capacidad de crear una gran empresa uruguaya con presencia global”, contó a Empresas & Negocios. En un viaje que realizó a Uruguay, desde Estados Unidos, donde trabajaba, Troisi le ofreció la oportunidad de unirse al equipo, propuesta a la que no se negó.
“Ya tenía ganas de regresar y no podía imaginar una mejor oportunidad para hacerlo: a una marca uruguaya worldclass con operación en toda la región, en plena etapa de crecimiento explosivo. Así que, con enorme alegría y orgullo, me uní a Overactive”, recordó. Lo que más le gusta de la firma es la energía de expansión y crecimiento, aspectos que van acompañados por el desarrollo de talentos.
Entre los desafíos y oportunidades que su área presenta, la entrevistada comentó que Overactive ha crecido exponencialmente y hoy necesita dar apoyo legal y de relacionamiento con los operadores claves. Dijo que es preciso continuar brindado un servicio de excelencia en los mercados más atractivos, y para ello, a la firma le toca dar apoyo en temas legales y de relacionamiento.
Ros indicó que todas sus experiencias laborales fueron ricas en diversos aspectos, pero si tuviera que decir qué de todo le ha servido más en esta etapa actual, es el haber trabajado con muchos países y aprender de las “bondades” de los diferentes estilos de trabajo, culturas y liderazgos.
La entrevistada nació en Montevideo, el 12 de agosto de 1983, de profesión es abogada pero su vocación es la comunicación y la dialéctica. Tiene una hija de un año un marido y dos hijos postizos. En sus horas libres elige salir a comer, y en su oficina no pueden faltar las fotos. Indica que quien le ha dejado más enseñanzas es su abuela paterna. “Una señora culta, que trabajó en la enseñanza y, aun retirada, nunca dejó de estudiar. Me enseñó a ser muy libre. Era una mujer de avanzada”, relató.
Su libro preferido es ‘Mi historia’, de Michelle Obama. Prefiere radio AM y periodísticos antes que la música. Es amante de las “lindas historias” del cine. Su pasión es correr y andar en bicicleta. Su lema: “Para que el mal triunfe, solo es necesario que los hombres buenos no hagan nada” (Edmund Burke).
En 10 años se imagina cosechando lo que ha sembrado. “Imagino al Uruguay como uno de los territorios más fructíferos en la generación de talento y servicios de calidad. Y veo un Overactive con miles de overactivers, desarrollando software para las mejores empresas del mundo, haciendo honor a nuestra consigna #WeKnowHow”, reflexionó.