“Nuestra premisa es nunca dejar de crecer”

Daniel Filgueiras, encargado de software en Carga Express


Los comienzos de un proyecto empresarial de jóvenes suelen ser trabajosos cuando no se cuenta con el apoyo necesario. Las dificultades pueden tornarse tan complicadas al punto de que se decida dejar la idea a un lado. Sin embargo, las ganas de emprender y la confianza en los proyectos pueden transformar lo negativo en el motor para continuar. Es el caso de Carga Express, empresa de terminales de carga para dispositivos móviles. Al principio, se encontraron con que la oferta de material en Uruguay era escasa, al tiempo que las tecnologías no estaban avanzadas. Pero sabían que si seguían adelante la idea funcionaria, y así pasó. Hoy la firma lleva seis años en el país y con franquicias en Ecuador. Su encargado de software, Daniel Filgueiras ingresó hace dos años a la empresa, y afirmó que trabajar como empresario es una experiencia muy diferente a su rubro pero que siempre estuvo en sus pensamientos hacerlo.

¿Cómo y cuándo surgió Carga Express?

En 2011, Hernán Filgueiras -hermano y socio- tuvo que concebir un proyecto de negocio para sus estudios en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad en la República. En ese entonces, sabía de estas terminales de carga que funcionaban en otros países y se le ocurrió que sería algo bueno para desarrollar a nivel local, entonces se unió a un amigo.

Sabían muy poco de electrónica, pero mucho de software. Implementaron un sistema basado en su punto fuerte. Se especializaron en el área electrónica del producto. Lograron diseñar una tecnología óptima que mandaron desarrollar profesionalmente a China.

Hace dos años me uní a la empresa y comenzamos proyectos nuevos, con un fuerte componente de software que apunta a tecnología de vanguardia y diseños modernos.

¿Qué servicios  ofrecen y en qué lugares?

El servicio de terminales de carga de baterías tiene dos modalidades. Una de ellas es Carga Monedero, en la que se instala el servicio en establecimientos de alto tránsito –como terminales, hospitales, shoppings y centros educativos, entre otros– y el usuario paga por su uso.

La otra aplicación de las terminales de carga es la de alquiler de empresas para eventos. En este caso, una marca lo brinda de forma gratuita al usuario. Funciona como acción de publicidad Below the Line (BTL).

En la actualidad, el emprendimiento cuenta con 60 máquinas en Uruguay, y ocho máquinas en Ecuador a través de la franquicia, todas en funcionamiento. Apuntamos principalmente a Argentina, Paraguay y México. Este año aspiramos a concretar estos acuerdos.

Por otro lado, comenzamos a trabajar en Terminales de Autoconsulta. Tienen un diseño de vanguardia y tecnología de punta desarrollada por nosotros, que les permite a los usuarios navegar en una pantalla táctil 22 pulgadas para realizar trámites según el establecimiento en el que se encuentre.

¿Cuáles son los principales objetivos de la empresa?              

Nos encontramos en un proceso de diversificación y expansión. Nuestro objetivo es instalar a Carga Express en una posición de privilegio como empresa de tecnología y servicios. Tenemos como principales metas, instalar nuestros nuevos productos en el mercado como lo logramos con las terminales de carga. A su vez, nos encontramos en un proceso de fuerte trabajo en la franquicia para lograr seguir instalándola en Sudamérica.

En cuanto a los clientes, ¿a qué tipo de público apunta?

Establecimientos de alto tránsito, lugares donde las personas tengan un tiempo de permanencia mínimo. Como por ejemplo, universidades, hospitales, eventos.

¿Qué cosas son las que distinguen a Carga Express dentro de su rubro?

El software que utiliza proporciona información para optimizar su funcionamiento.  Se monitoriza a través de una computadora y brinda estadísticas de consumo, funcionamiento, entre otras cosas. A su vez, la electrónica y programación desarrollada por nosotros, permite optimizar la carga de los dispositivos. En cuanto al proceso, es todo realizado por nosotros -diseño, manufacturación, hardware, software-, permitiéndonos realizar productos a medida de cada establecimiento y evento.

¿Cuántas personas integran el equipo? ¿Cómo se distribuyen?

Somos tres socios. Hernán Filgueiras es el director y se encarga de lo comercial. Brian Reveles es el encargado de la electrónica, y yo del software. En cuanto al resto de las tareas intentamos distribuirlas, administrando de la mejor forma nuestros tiempos.

¿Cuál es el ABC o los puntos esenciales de la empresa para trabajar?

Nuestras terminales siempre tienen que cumplir las expectativas del establecimiento o cliente. Las de Carga Monedero tienen que encontrarse siempre en perfecto estado. En cuanto a las que se encuentren en eventos, se brinda un diseño y solución a medida para que nuestras máquinas se luzcan tal como desee el cliente.

Nuestra premisa es nunca dejar de crecer. Con los años, tanto el hardware como el software, han mejorado considerable y continuamente, siempre en pos de mejorar la calidad del servicio. Y a medida que mejoramos estas cualidades, intentamos generar nuevos productos que las aprovechen.

¿Hace cuánto tiempo se asoció a AJE? ¿Cuáles fueron los motivos?

Hace tres años. Por la presidencia de un colega amigo, Pablo Buela.

¿Qué proyectos a futuro tiene la empresa?

Queremos instalar aún más el concepto de autoconsulta y autoservicio en nuestro país, utilizando nuestras tecnologías. No solo en establecimientos de alto tránsito, sino utilizar el servicio en todo su concepto. Mejorar los tiempos de espera de la gente, y facilitarle el acceso a ciertos productos y trámites.

¿Cómo es ser empresario en Uruguay? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de emprender en nuestro país?

No es sencillo, somos un mercado muy chico, y con procesos de formalización engorrosos y lentos. Pero por otro lado, en los últimos tiempos se han creado organismos y diversos apoyos a empresas. La comunidad de empresarios es muy afín de ayudar y tender una mano a sus pares, eso es algo que ayuda por ejemplo para obtener ciertos contactos o clientes.


Señas de identidad

Daniel tiene 28 años, nació en Montevideo y actualmente vive con su familia y su hermano. Aunque de niño su sueña era ser arquitecto, es especialista en ingeniería de sistemas, ya que realizó la carrera en la Universidad de la República, y hoy se encuentra planificando un posgrado. Trabajó varios años en una de las principales empresas de tecnología del mundo.

Se considera una persona ambiciosa que siempre busca el crecimiento personal, además de ser perseverante y flexible. Su libro favorito, así como su película es Ángeles y Demonios. Y una frase que lo caracteriza es: “crear, construir, aunque te equivoques. No dejes de luchar, por ser feliz”. Su lugar predilecto en el mundo es la playa, y las actividades que elige en los tiempos libres es leer ficción y mirar series nuevas.

Admira profundamente a Roger Federer. Lo describe hombre que estuvo mucho tiempo en la cima, y cuando ya no tenía que demostrar nada, y los años lo alcanzaron, redefinió su juego -su vida- para lograr lo que más deseaba, seguir jugando. Su esfuerzo fue premiado, y otra vez alcanzó en la cima.