Santiago Oitaben, empresario emprendedor
La Asociación de Jóvenes Empresarios del Uruguay (AJE) invitó a sus socios a que sean parte de una instancia de reconocimiento. A través de la presentación de candidatos, se eligieron a los “socios destacados”, es decir, aquellos miembros de la comunidad cuyo accionar empresarial está regido por el núcleo de valores con los que AJE se identifica, vinculados a la innovación, liderazgo, solidaridad y resiliencia. En ese sentido, Empresas & Negocios dialogó con uno de los reconocidos: Santiago Oitaben, quien es socio de varias firmas y uno de los impulsores de CanastasUY.
¿De qué empresa forma parte y a qué se dedica cada firma?
Soy socio y director de Álamo Inmuebles Industriales, socio de Pointer Negocios Inmobiliarios y Socio de Look Out, empresa de publicidad exterior.
¿Cómo llegó a la Asociación de Jóvenes Empresarios del Uruguay?
Cuando tenía 25 años vi una gráfica en Twitter, y realmente me sorprendió ver gente de tan temprana edad emprendiendo al igual que yo… uno a veces se siente sólo en el camino. Fue encontrar un lugar de pares en el que me pude desarrollar como empresario y, principalmente, como persona.
¿Cómo ha sido, desde su lugar de trabajo, adaptarse a la nueva normalidad que llegó con la pandemia?
Fue un desafío y lo tomamos como tal. Siempre existe la oportunidad en la crisis y desde este lugar conocimos un mundo más dinámico con las conferencias, con la posibilidad de hablar más seguido con clientes y socios en el extranjero, maximizar tiempos de viaje entre reunión y reunión, entre otras cosas.
AJE lo ha reconocido por el logro de CanastasUY y su impacto a gran escala como jóvenes empresarios en una problemática inmediata y real en plena pandemia. ¿A qué se debe eso?
CanastasUY es el gran orgullo de los miles de voluntarios que colaboramos de una forma u otra. Si bien hubo un liderazgo marcado por parte de los que lo fundamos en un comienzo, no existe un líder sin seguidores, así que el logro es obviamente compartido por todos los que colaboramos.
También a uno lo deja muy contento ver a esta generación de jóvenes empresarios cuestionándose permanentemente cómo generar un impacto social positivo; esa es una gran alegría de la cual intentamos ser parte.
¿Cómo se dio la idea de impulsar esta iniciativa emprendedora solidaria?
La idea surgió de Juan Balsa y Caro Ameglio, que son pareja, mientras miraban en la televisión cuando empezó la pandemia sólo malas noticias y quisieron «crear» algo que contagiara algo positivo… Lo lograron. Luego nos sumamos distintos voluntarios y colaboramos para llevar esa idea original -que aplicaba a Colonia Nicolich en Canelones- a todo el país.
¿Se espera continuar trabajando de la misma manera durante este año que transcurre?
Estamos atentos a la realidad que se vaya desenvolviendo para evaluar dónde se necesita la ayuda, pues no queremos, como CanastasUY, caer en un sistema eterno-asistencialista, sino dar una mano mientras duren los efectos negativos de la pandemia respecto a la emergencia alimentaria.
¿Qué balance general podrían hacer de su área de trabajo en CanastasUY recapitulando el 2020?
Un éxito rotundo, sin duda. A nivel personal y colectivo. Recibir reconocimientos desde el Parlamento hasta del Sindicato de Trabajadoras Sexuales y tantas organizaciones sociales con un trabajo increíble, muestra el impacto positivo que tuvo el movimiento en el país lo cual nos da una alegría inmensa; en lo personal, una de las mayores de mi vida.
¿Cuáles son las expectativas que tienen en cuanto a la organización para 2021?
Responder donde el país necesite, estar para el uruguayo que se encuentre en una situación complicada. Los voluntarios están y es lo que nos piden permanentemente.
¿Algo más que quiera agregar?
Quiero agradecer a los medios por difundir esta movida. Fueron clave los medios de prensa, influencers y demás para que esta movida tenga el impacto que tuvo que tener. Así que agradecerle al equipo de Crónicas.
Señas de identidad
Santiago tiene 29 años, nació en Montevideo y es de profesión empresario. Si tuviera que elegir un libro se queda con “Economía y Felicidad”, del uruguayo Alejandro De Barbieri. Su película favorita es La Cabaña, de Stuart Hazeldine. La frase que lo identifica en su vida es “Si no viniste a esta vida a vivir, ¿qué estás haciendo?”
El empresario posee una gran admiración por su madre Virginia, quien le enseñó a base de ejemplos que se puede lograra lo que se sueña y que en la vida se viene, al menos, a dejarlo todo por intentarlo.
