Las últimas proyecciones sobre América Latina del FMI sitúan a la región creciendo a una tasa de 0.6% este año.
Por Sofía Tuyaré (*)
El mundo es un desafío para la economía local. Los vientos que vienen de exterior no son tan favorables y generan riesgos para el desempeño económico de Uruguay.
Para la región las noticias también son desafiantes. Brasil crece a tasas más moderadas de lo previsto, Argentina transita una recesión que se prevé que este año el escenario no se modifique y México enfrenta incertidumbre de algunas políticas económicas.
El Fondo Monetario Internacional (FMI), en su reciente actualización de julio de su informe “Perspectivas de la economía mundial” (informe WEO por su sigla en inglés), estima que el producto de América Latina y el Caribe crezca 0.6% este año y 2.3% el próximo.
El escenario de la región es complejo. Los factores internacionales, reiterados en diversas oportunidades, como el no resuelto Brexit, y la guerra comercial entre Estados Unidos y China, sumados a las dificultades internas que enfrentan las principales economías que componen el grupo latinoamericano, pueden tener efectos en el desempeño económico de estas latitudes.
Exportaciones
Las exportaciones de bienes de Uruguay en el acumulado a julio de 2019 fueron de US$ 5.345 millones, según el informe de comercio exterior de Uruguay XXI. Esta cifra significó un crecimiento de 1.6% en los primeros sietes meses del año respecto al mismo periodo del año anterior.
Dentro de los productos que se destacaron en esta parte del año, la soja, la carne bovina y el trigo fueron los bienes que tuvieron mayor incidencia positiva, lo contrario sucedió con el arroz, la madera y el ganado en pie.
Analizando los principales destinos de las exportaciones, si bien la región no es el principal socio comercial en términos globales, observamos que varios países vecinos componen la lista de principales compradores de los bienes locales. Pero como algunos productos tienen orientación regional, por tanto, lo que suceda en dichos países puede afectar ramas de la economía.
En el periodo enero-julio de 2019, el segundo destino de la mercadería uruguaya fue Brasil, superando los US$ 600 millones y con el 14% de participación en las exportaciones totales. Dentro de los principales productos exportados en el periodo, según el organismo, se destacan los plásticos, productos lácteos y vehículos.
El quinto lugar lo ocupa Argentina, con el 4% de la participación de las exportaciones totales de Uruguay. Las ventas hacia ese país alcanzaron los US$ 242 millones en los primeros siete meses del año, y sufrieron una importante caída del 25.5% respecto al mismo periodo del 2018. Según Uruguay XXI, las autopartes, los plásticos y los artículos de limpieza fueron los principales bienes comercializados hacia la vecina orilla.
El octavo lugar en este periodo fue para México, con solo el 2% de la participación según destino. Las exportaciones entre enero y julio del corriente año fueron de US$ 110 millones, y la caída fue también significativa. Las ventas hacia dicho país cayeron un 20% respecto a enero-julio de 2018.
Países
El FMI proyecta que el incremento de este año sea una tasa de 0.6% para América Latina y El Caribe, registro más bajo desde 2016. Esta proyección es 0.8 puntos porcentuales menor a la pronosticada en el informe de abril. La baja de las expectativas responde a los crecientes riesgos a nivel internacional antes mencionados y al resultado del primer semestre que fue menos vigoroso al previsto.
La economía argentina está en estanflación, y no se prevé que cambie esta situación en el corto plazo. El organismo ajustó a la baja sus estimaciones respecto al informe de abril. En julio, las proyecciones para el vecino país eran que disminuya 1.3% este año y que crezca 1.1% el año que viene. El recorte en las estimaciones fue significativo para el 2020. En abril estimaba que aumentaría 2.2% y lo bajó a la mitad.
Para Brasil, se espera que el crecimiento más moderado del que se estimaba para el principal economía de la región. El FMI proyecta un incremento de 0.8% para la economía brasileña este año. Esto significó un recorte de 1.3 puntos porcentuales respecto al informe de abril. Para el próximo año, el organismo estima un crecimiento de 2.4%.
En México existe incertidumbre por algunas políticas económicas, y por el cumplimiento de la meta fiscal para este y el próximo año. El organismo estima que el PIB mexicano crezca 0.9% este año y 1.9% para el próximo. Las proyecciones para este país también fueron ajustadas a la baja, en principio por el magro desempeño que la economía mostró en el primer semestre y por los riesgos persistentes debido a la incertidumbre en materia económica.
(*) Economista, integrante del departamento de Consultoría de CARLE & ANDRIOLI, firma miembro independiente de Geneva Group International.
