Uruguay se posiciona en los primeros puestos en transformación digital

El pasado lunes 21 de marzo, la Fundación Telefónica Movistar realizó el lanzamiento de su primer Informe de la Sociedad Digital Latinoamérica (ISD) 2020-2021. En los datos referentes a Uruguay, destacó el hecho de que ocupa el 3º puesto en transformación digital en América Latina, en tanto, está en el lugar 47º en el mundo.

La pandemia por covid-19 ha acelerado de forma irreversible los procesos de digitalización, y ha puesto en evidencia que las redes fortalecen y hacen resilientes a las sociedades y a la actividad económica. La digitalización ha sido fundamental para que las economías y sociedades puedan seguir operando ante las demandas que trajo consigo el nuevo contexto.

En el caso de América Latina, la transformación digital supone una gran oportunidad para remodelar sus economías, y este hecho quedó en evidencia, más que nunca, en este último tiempo, según da cuenta el informe presentado.

Indica que uno de los mayores desafíos a los que se enfrenta Latinoamérica es la desigualdad, y para superarlo es imprescindible reforzar las competencias digitales de la población. La conectividad es vital y lo será de manera creciente, ya que garantiza el acceso a las oportunidades y, particularmente, a la educación.

Al mismo tiempo, el documento indica que la tecnología emerge como un motor de progreso y bienestar, y todo apunta a que mejorará la vida de las personas, la productividad de las empresas y el crecimiento de los países. Un ejemplo en cifras es que 10% en la penetración de banda ancha en los países de la región podría provocar una subida de 3.19% del producto bruto interno, y del 2.6% de la productividad, contribuyendo a crear más de 67.000 empleos directos.

En esa línea, y apostando a los mejores resultados, es que Movistar y Fundación Telefónica Movistar promueven la transformación digital de Uruguay. Este principio quedó en evidencia en la presentación del informe del pasado lunes 21 de marzo, en un encuentro del que participaron como oradores y analistas la presidenta de Ursec, Mercedes Aramendía; Guillermo Varela, presidente de Cámara de la Economía Digital del Uruguay (CEDU);  y José Juan Haro, director de Asuntos Públicos y Regulatorio de Telefónica Movistar Hispam.

Los expositores conversaron sobre el rol de la digitalización para impulsar el crecimiento económico de Uruguay, el papel de la infraestructura de telecomunicaciones en el desarrollo de la digitalización, cómo incentivar la inversión en tecnología a través de la regulación y las políticas públicas y, finalmente, reflexionaron sobre las decisiones claves para seguir construyendo la sociedad digital. La primera edición del ISD se adentra en el análisis del nivel de desarrollo del ecosistema digital en el país y la región, plasmando el grado de avance en los distintos ámbitos. El estudio deja en evidencia que una infraestructura en telecomunicaciones sólida y resiliente así como las herramientas digitales, fortalecen a las sociedades y economías, ya que mejoran la competitividad de los países.

La pandemia aceleró notoriamente los procesos de transformación digital y demostró la interrelación entre el grado de digitalización de los países y el impacto económico por ella provocado.

Cifras representativas

En materia de desarrollo digital, Uruguay se ha posicionado en los primeros lugares entre los países de Latinoamérica y por encima de la media. Por ejemplo el Network Readiness Index indica que el país ocupa el 3º puesto entre los países del continente en lo que refiere a transformación digital; y el 47º en el ranking global.

A su vez, Uruguay ostenta de una puntuación de 0.8500/1 del E-Government Development Index (EGDI), elaborado por la Organización de Naciones Unidas, que mide el grado de preparación y la capacidad de las instituciones nacionales para utilizar tecnología digital con el objetivo de prestar servicios públicos.

Esto se analiza en tres dimensiones vinculadas al e-gobierno: la provisión de servicios online, la conectividad de telecomunicaciones y la capacitación de la población. En esa línea, Uruguay supera a Canadá y el promedio global americano y europeo.

Sin embargo, expone el informe, aún existen retos y oportunidades por capitalizar. En ese sentido se destaca la necesidad de invertir en educación y competencias digitales, de construir una conectividad inclusiva y sostenible, cerrar las brechas digitales, conectar a todos y garantizar la igualdad de acceso al desarrollo y las tecnologías digitales. Todo ello debe generarse en un entorno de confianza digital, apostando a un manejo ético y responsable de los datos.

Según el ISD, entre 2018 y 2022 se registrará un cambio en hasta 42% de las habilidades básicas requeridas para realizar un trabajo, lo que estimula a las personas a desarrollar las habilidades blandas. En este marco, a través de distintos proyectos educativos, Fundación Telefónica Movistar fomenta el aprendizaje de las competencias digitales fundamentales.

Movistar ha impulsado el desarrollo de las telecomunicaciones en el país, desde que introdujo la telefonía celular en el país, hace tres décadas. Se ha convertido en un aliado digital, ofreciendo soluciones tecnológicas innovadoras que buscan ayudar a mejorar la calidad de vida de las personas y que agregan valor para el desarrollo de las personas.

Su compromiso con la transformación y el ecosistema digital fomenta oportunidades para el desarrollo de toda la sociedad uruguaya a través de distintas estrategias: brindar herramientas para adquirir capacidades digitales, promover el desarrollo del comercio electrónico, y mejorar su estructura de telecomunicaciones, entre otras.

El ISD es una fotografía de la digitalización en Uruguay y la región, convirtiéndose en un referente de análisis para diferentes actores del sector público y privado, educativo y organizaciones no gubernamentales comprometidos con la transformación digital sostenible e inclusiva en el país.


¿Cómo seguir construyendo una sociedad digital?

Los oradores, Aramendía, Varela y Haro, culminaron el evento expresando las maneras en las que es necesario continuar trabajando para construir una sociedad digital. La presidenta de Ursec aseguró que Uruguay tiene una tradición muy buena, en el sentido de que es un país conocido internacionalmente por la estabilidad general. “Eso genera confianza, pero no es algo que se hace de un día para otro y hay que seguir cuidándolo. Tenemos una buena estructura empresarial privada y pública que nos ayuda a desarrollarnos, y en materia tecnológica estamos muy bien posicionados”, dijo.

Consideró que el país está bien enfocado y es necesario apretar el acelerador para los cambios y para que esto se refleje en toda la sociedad, “formando parte de la nueva vida, donde la digitalización es clave”.

Varela, a su turno, expuso queel desafío es educarnos mejor en todo sentido, tener una política de Estado consensuada, tanto por la política como por el resto de la sociedad civil, “porque en estos tiempos es muy difícil desarrollar proyectos a largo plazo, ya que se ven regidos por el gobierno de turno. Aunque Uruguay, según los grandes indicadores, no parecería tener importantes cambios democráticos al modificarse los gobiernos. Y otro desafío es ser un hub de tecnología”, opinó.

Por su parte, Haro, subrayó que la digitalización no se trata solo de unos y ceros, sino que es un tema humano y los retos del futuro tienen que ver con hacernos esencialmente nosotros. “Esto se relaciona con tres cosas: la inclusión, solo asegurarse de que llegue la conectividad a quienes están en zonas rurales, sino que las mujeres o los ancianos no sean despedidos de la sociedad. Que conectarse este al alcance de todos”.

Lo segundo, dijo, es la educación digital, que no tiene que ver solamente con usar las tecnologías, sino con asegurarse que la sociedad esté capacitada de incorporarlas en la capacitación para estudiar o trabajar.

“El tercer frente es el debate de lo que queremos ser, con los valores, con los principios. Tenemos instituciones muy buenas que manejan nuestros datos y es importante que se controle cómo se explotan los datos nuestros, cuán responsable se es, qué información se difunde y reflexionar sobre los riesgos y ciberataques”, señaló.