Bettiana Díaz, diputada del MPP que sustituyó a Gonzalo Mujica
“Qué jovencita”, le dicen los propios funcionarios del Parlamento cuando ella explica que es diputada. Con 29 años, es la más joven de todo el Poder Legislativo, pero asegura que ese nunca fue impedimento para integrar el sector liderado por el senador José Mujica. Tampoco lo fue el ser mujer, aunque entiende que eso no es lo normal en la política, donde para muchas “la carrera de obstáculos que hay que recorrer es mucho más tupida que para los hombres”. A Bettiana Díaz le tocó asumir una responsabilidad extra al sustituir al exdiputado Gonzalo Mujica, y con eso devolverle la mayoría al Frente Amplio (FA).
Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo
-En setiembre del año pasado Gonzalo Mujica renunció a la banca, a usted le tocó sustituirlo y devolverle la mayoría al FA. ¿Eso le generó una responsabilidad extra?
-Sí, claramente. Fue un gran desafío en su momento, y es una gran responsabilidad poder seguir trabajando en las comisiones donde actuaba Mujica, que son bastante importantes. Creo que hubo un antes y un después de la recuperación de la mayoría parlamentaria, y eso no solo se debe a que Mujica prácticamente no tenía diálogo con ningún sector del FA cuando se fue, sino también a que no había espacios comunes como para poder lograr mayorías para votar proyectos.
-¿Fue la mejor salida posible a ese problema que estaba generando Mujica?
-Yo creo que él renunció porque no había una salida alternativa, es decir, él agotó sus caminos de diálogo. Creo que fue una buena señal [la renuncia] porque cuando uno vota una lista y un programa, y el que fue electo ya no representa los intereses de quienes lo votaron, esa es la mejor manera de resolverlo.
-¿Cómo ha sido su proceso de adaptación al trabajo parlamentario?
-La recuperación de la mayoría parlamentaria del FA sin dudas fue muy relevante, y ya se había aprobado la Rendición de Cuentas, lo que aceleró el tratamiento de otros proyectos que durante el debate de la Rendición tenían una discusión mucho más lenta. Yo viví con mucha intensidad este período en el sentido de que hubo un montón de iniciativas importantes que se aprobaron, para las cuales el FA no hubiera tenido mayorías. Entre ellas, se amplió la agenda de género.
-Sin embargo, según un informe elaborado por el Programa de Estudios Parlamentarios del Instituto de Ciencia Política (UdelaR), en 2017 cayó la cantidad de leyes aprobadas en relación al mismo período de la anterior legislatura, lo que se debió principalmente a la pérdida de la mayoría.
-Si bien se redujo la cantidad de proyectos, yo no percibí que se alterara drásticamente la forma en la discusión de los mismos, es decir, cada vez que el Ejecutivo envía una iniciativa al Parlamento, se discute mucho en las comisiones, entonces, lo que sí cambió fue el trámite en las Cámaras, pero no se resintió la discusión política.
El 2017 fue un año difícil para el FA porque no contó con la mayoría parlamentaria después de muchos años de tenerla, pero de todas formas se lograron activar determinados mecanismos de negociación y diálogo, que ya existían, pero que quedaron mucho más de manifiesto en la última Rendición de Cuentas.
“Sigue habiendo una brecha entre el rol de la mujer y el del hombre dentro del Parlamento”.
-¿Qué expectativas tiene para este año que comienza?
-En el 2018 la expectativa del FA es redoblar la apuesta y profundizar algunas discusiones. Lo que viene, por las características de este año, va a ser más que nada el debate con respecto a la última Rendición de Cuentas de este gobierno, y la discusión de la ronda de Consejos de Salarios.
-Este es también el año preelectoral; el año que viene va a ser dedicado a la campaña.
-Sí. El 2019 va a ser un año complicado porque los políticos se van a dedicar a la campaña, y además esta campaña electoral ya empezó. El 2018 va a ser muy largo en materia de la agenda de discusión política pública. De hecho, desde los primeros días de enero hemos tenido movilizaciones a nivel social del PIT-CNT y de otros sectores de la sociedad, y eso es algo bien particular porque en general este es un mes donde se baja la intensidad.
Esta va a ser mi tercera campaña electoral militando de lleno, y he notado ciertas particularidades que son bastante preocupantes. Se está generando cierta intolerancia en espacios que antes no se nutrían tanto como las redes sociales, y las figuras políticas tenemos una gran responsabilidad. Hay una moda de gente que se filma hablando de un tema, y las redes están habilitando mensajes de odio, de tono amenazante, por lo tanto en esta campaña tendremos que tener muchas precauciones y dar señales de que esto no puede ser de esa forma, con tanta intolerancia.
La mujer y las leyes: hay avances, pero falta
Díaz integra comisiones parlamentarias donde hay muy pocas mujeres. En la de Hacienda, por ejemplo, las diputadas que hay son todas del FA. “Eso no es menor porque es una comisión que discute la ejecución presupuestal del Estado, y eso también tiene que ver con el rol que ocupa la mujer en las discusiones políticas. Saliendo de la agenda de género, es importante que nosotras también logremos tener una gran participación en el debate económico”, opinó en entrevista con CRÓNICAS.
A su vez, destacó que en los últimos meses del 2017 se lograron muchísimos avances en materia de género –cuota política, feminicidio, violencia de género-, lo que se debe a que llegaron más mujeres al ámbito legislativo. De todas maneras, lamentó que “en el debate parlamentario muchas veces queda claro que sigue habiendo una brecha entre el rol de la mujer y el del hombre dentro del Parlamento”.