Los resultados de la pandemia, la reforma educativa y el rol del gobierno fueron algunos de los temas que habló Martínez en entrevista con CRÓNICAS. Si bien aclaró que no le correspondía dar detalles de cada sector empresarial, sostuvo que el turismo y algunos rubros industriales fueron los más afectados. Por otra parte, acerca de la situación cambiaria con Argentina, sostuvo: “Uruguay no tiene forma de amoldarse a esa realidad”.
Por Antonella Aguinaga | @antoaguinaga15
-¿Qué rubros fueron los más perjudicados por la pandemia?
-La industria en términos generales no estuvo afectada, la tecnología de la información tampoco, entonces, hay que apuntar más a los sectores como algunos rubros industriales o el turismo, que fueron los más perjudicados por esta pandemia. La industria farmacéutica no se vio tan golpeada desde un principio y hoy no está teniendo ningún problema. La metalúrgica lo tuvo, entonces, hay sectores que sí y otros que no, pero los detalles se los dejo a ellos.
-¿El rol del gobierno para aplicar medidas paliativas fue el adecuado?
-Uno siempre aspira a más y solicita más cosas porque parece que no son suficientes. Se aplicaron medidas en el camino correcto, muchas fueron muy importantes porque permitieron sostener a las empresas y las ayudaron a no caer, como el seguro de paro parcial o la flexibilización de los préstamos SiGa. Hubiéramos querido más apoyo en cualquier sector, pero por lo menos hubo algo importante que fue sostenerse. El gobierno ayudó y sigue ayudando, por lo tanto, creo que fueron significativas. Nosotros pretendíamos algo más, pero las que se hicieron fueron fundamentales.
-¿Cómo cree que Uruguay puede competir con Argentina dada la diferencia de precios?
-Argentina está en una situación bastante complicada, incierta y manejando su economía prácticamente al día. Esto hace posible acompañarla y predecirla, por lo tanto, desde este lado entendemos que Uruguay económicamente no debe tomar medidas que vayan hacia esa dirección. Por el contrario, debe mantenerse al margen y fortalecerse. Ahí lo único que puede pasar es que la situación política se acomode y que los estados económicos vengan atrás.
Actualmente, Uruguay no tiene forma de amoldarse a esa realidad por más que aplique mayores incentivos como puede ser ayudar en la devolución de impuestos, como ha hecho en los combustibles, y demás. Mucho más que eso no puede porque afectaría nuestra economía; hoy no veo una forma clara de salir a equiparar o enfrentarlo en el corto plazo.
Hay cosas que preocupan y mucho, como el sector turístico, que va a seguir siendo afectado porque trabaja a nivel masivo y por tanto lo va a sentir. El sector de comercio de fronteras está teniendo grandes dificultades con la diferencia cambiaria y Uruguay no va a poder acomodarse porque para equiparar el tipo de cambio real con el vecino no solo depende de Uruguay, sino del vecino. No se puede meter en la política económica así que no vemos a corto plazo una medida que salvaguarde, más allá de que nosotros ya habíamos propuesto abrir las fronteras para el turista, pero no para los bienes y así proteger al comercio de fronteras a nivel nacional.
-¿No ve medidas posibles a corto plazo en el comercio de fronteras entonces?
-No vemos posibilidad real, por lo menos de aquí a un año en que esto se acomode por lo que te decía. Es un problema de competitividad de cambio real, salvo que Argentina tenga una inflación galopante, que puede darse y eso haga que los precios internos argentinos suban y se pongan en paridad. Pero del lado uruguayo es muy difícil llegar a algo porque preferimos mantenernos estables y como país que planifica con una regla fiscal que se aplica, no creemos que vaya para ese lado porque también hay que exportar todos los demás sectores.
-En entrevista con CRÓNICAS usted señaló que la educación está en un pozo. En ese sentido, ¿considera que la reforma educativa está bien planteada?
-Somos impulsores y casi correlatores del proyecto de libro abierto 2021, y allí hemos propuesto varias opciones a nivel técnico con docentes de primer nivel de todos los partidos políticos. Lo hemos presentado personalmente en el Palacio Legislativo junto a Richard Read por el PIT-CNT. Era una propuesta de técnicos, profesores, trabajadores y empresarios en discusión sobre hacia dónde iban a ir los cambios. Hoy se están implementando algunos de ellos.
Creemos que Uruguay debe tener un cambio drástico en la educación y en la forma de educar. Hay que darles a los alumnos más tiempo de clase, crear pensamiento creativo y capacitar a los docentes a nivel universitario. El mundo está yendo hacia ahí y Uruguay está distante, debemos salir del estancamiento lo más rápido posible.