José Bayardi, ministro de Defensa
A dos meses y medio de que el Parlamento aprobara –con los votos del oficialismo y del Partido Independiente- la reducción de los efectivos de altos mandos del Ejército, el ministro de Defensa afirmó que no descarta que para algunos legisladores del Frente Amplio (FA) exista un tema ideológico con respecto a ese asunto. Además, insistió en la importancia de que su cartera cuente con más recursos, aunque es consciente de las carencias presupuestales que padece el país.
Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo
-¿Cuáles son sus prioridades de trabajo como ministro de Defensa en lo que resta del período?
-Yo llegué acá para un lapso final de este período de gobierno en función de la situación que se dio a principios de abril, y en lo que resta de tiempo hay que terminar las cuestiones que ya venían encaminadas de la gestión y hay pocas posibilidades de innovar. Nosotros nos encontramos con proyectos que ya estaban en curso, como la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas (FFAA), que se terminó de sancionar en este quinquenio, y ahora hay una etapa muy importante que es la reglamentación de lo que emana de la iniciativa. Otro proyecto al que hay que hacerle ajustes reglamentarios es el de la ley de fronteras.
-¿Por qué el Poder Ejecutivo no ha reglamentado aún esa ley, cuando fue aprobada hace un año?
-Hay una sensación de que la ley de fronteras no se cumple, [pero] el patrullaje militar de las fronteras se está cumpliendo. Ahora resta ajustar un poco más los procedimientos. Cuando las unidades que tienen claramente definidas sus potestades en las fronteras como la Aduana, el Ministerio de Ganadería, Migración, requieren apoyo, eso es de fácil coordinación. El tema es que fuera de los centros poblados hay algunas funciones que pueden ser cumplidas en relación a la prevención o detención en caso de flagrancia y de presuntos actos de delincuencia que se puedan estar realizando. Esto requiere un afinamiento y gran parte ya se hizo con la Fiscalía de Corte. En la medida en que un procedimiento sea mal llevado, eso puede no solo tener responsabilidades sobre quienes lo desarrollan, sino también echar a perder todo el proceso.
-¿Es prioridad este tema para usted?
-Sí. La prioridad para mí es que la función sea cumplida bien, sin que implique responsabilidades para los efectivos de este ministerio que la realicen.
-¿Maneja plazos?
-No. Yo calculo que en el correr de este año lo vamos a dejar reglamentado. Hay que definir bien lo que es un centro poblado, la distancia en la cual se puede actuar, los procedimientos que se pueden llevar adelante y cómo ellos deben quedar sujetos a la coordinación necesaria con las fiscalías para que no sean invalidados. Esto es lo que a veces no se entiende y se plantea que el patrullaje no se realiza; sí se hace, lo que estamos ajustando es lo que respecta a los procedimientos.
-¿Cree que las FFAA cumplen actualmente con sus cometidos, considerando el estado de sus recursos materiales?
-Las FFAA, como está definido en la Ley Marco de Defensa, cumplen una primera función que es ser el componente militar de la defensa de intereses estratégicos que tiene el país. Ello implica recursos materiales y humanos. Los recursos humanos son permanentemente capacitados para cumplir esa función. Desde el punto de vista de los recursos materiales, estamos en un país que tiene carencias presupuestales. Yo quisiera tener más recursos para inversión, ya sea en plataformas navales para la custodia del mar territorial, para el cumplimiento de las misiones de la Fuerza Aérea (FAU), pero en este país el presupuesto es una frazada corta, quiere decir que siempre hay una puja importante dentro de la administración por la asignación de los recursos.
-¿El Ministerio de Defensa no es una prioridad?
-No es una prioridad desde el punto de vista de la asignación de los recursos.
-¿Debería serlo?
-Deberían atenderse algunas necesidades que tenemos para el mejor cumplimiento de las misiones que nos son asignadas.
-¿Se refiere a los recursos materiales únicamente?
-A los recursos materiales particularmente. Desde el punto de vista de los recursos humanos, su capacitación y calificación para el cumplimiento del componente militar de la defensa tiene bastante reconocimiento [en el mundo]. Aparte, la sociedad tiene que entender que tenemos capacidades y logística que podemos poner a su servicio ante situaciones de emergencia, inundaciones, desastres naturales, como ha sucedido en múltiples oportunidades. Por otro lado, debemos considerar que hay presencia de Uruguay en el mundo que se sustenta en el accionar del contingente militar, ni hablar en las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas, donde el país tiene un prestigio muy grande.
-Sin embargo, el tema de las misiones de paz suele generar discrepancias importantes en la propia interna del FA. ¿A qué lo atribuye?
-Genera cortocircuitos en cuanto a las valoraciones que tienen algunos compañeros con respecto a esto, sobre todo en ciertas misiones en particular. Hubo muchas discrepancias en el FA en relación a la misión de Haití, que el país ya la abandonó, pero hoy tenemos una presencia importante en el Congo, en la península del Sinaí, y ahora fuimos convocados para la misión de los Altos del Golán.
-Recién decía que deben atenderse algunas necesidades en cuanto a los recursos materiales. El comandante en jefe de la FAU realizó una propuesta sobre la administración presente y futura de su flota en ese sentido. ¿El gobierno la ha analizado?
-Nosotros estamos analizando y yo pido mensualmente el estado de disponibilidad del conjunto de las aeronaves que estén operativas. Hay un planteo de disminuir la cantidad de aeronaves [es decir, dejar de lado las obsoletas] para concentrarse en tener mayor disposición de las que efectivamente tenemos [lo que implica modernizar algunas ya existentes], y acá siempre nos encontramos con un problema presupuestal. Estamos negociando con el Ministerio de Economía la posibilidad de modernizarnos unas cuantas décadas y sustituir los Hércules, que ya tienen más de 50 años. Tomamos nota de lo que la FAU nos ha planteado, compartimos gran parte de sus demandas, pero nos toca a nosotros pelearnos con Economía –pelearnos entre comillas-.
Posiciones encontradas entre el gobierno y la bancada frenteamplista por la reducción de las FFAA
-¿En qué se basó el Poder Ejecutivo para llegar al número de reducción de coroneles y generales en el Ejército Nacional en la reforma de la Ley Orgánica Militar?
-Se vio que en la época de la dictadura hubo un incremento importante de los cuadros de oficiales generales y superiores, y que en algunos lados había un número de oficiales superiores que, en comparación con otras fuerzas del mundo, estaba un poco exagerado. Incluso se podía ascender sin que hubiera vacantes, entonces el Poder Ejecutivo planteó la recomposición de la pirámide.
-Pero el Parlamento redujo aún más ese número. ¿Cuál fue el fundamento de esa decisión?
-Nosotros defendimos el número que presentamos y el Parlamento disminuyó algunos, y querían bajarlo todavía más.
-¿Considera conveniente esa decisión del Parlamento?
-Nuestro planteo permitía partir de determinado número y luego ir readecuando todo el cuadro piramidal. Y después, si había que hacerle ajustes, eso se podía hacer en cada etapa presupuestal.
-¿A qué adjudica esa reducción y la intención de bajarlo todavía más?
-Hubo algunos fundamentos que nosotros no compartimos: planteaban que había un número exagerado y que la propuesta que había hecho el Poder Ejecutivo no acomodaba suficientemente el número. Nosotros jugamos con una posición más gradualista, pero el Parlamento lo entendió de esa forma.
-Planteo que surgió dentro de la propia bancada frenteamplista.
-Exacto.
-¿Puede haber un tema ideológico detrás de eso?
-No descartaría que para algunos pudiera existir un tema ideológico, pero no fue la mayoría de la bancada de gobierno la que se posicionó de esa manera.