El sábado 4 de noviembre se llevarán a cabo las elecciones de jóvenes del Partido Colorado (PC), en un escenario totalmente distinto al de las anteriores, ocurridas en 2012, donde obtuvieron más de 50.000 votos. En esta ocasión, el partido atraviesa algunas dificultades, producto del retiro de la política de Pedro Bordaberry y la ausencia de candidatos definidos. En diálogo con CRÓNICAS, dirigentes de las agrupaciones juveniles atribuyeron la posible baja en la votación a esa situación adversa.
Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo
En 2012, Bordaberry se posicionaba como un candidato fuerte hacia 2014, recorría el país, y había más publicidad. En definitiva, el PC estaba en una situación mejor. Así lo recordó Maxi Campo, prosecretario de la Juventud de la colectividad. Pero la actual campaña, agregó, “ha sido mucho menos sectorizada, y los dirigentes mayores no han dado el mismo empuje que en las elecciones anteriores”.
Además, dijo que un error que se ha repetido en las últimas instancias electorales ha sido apostar a la cantidad y no a la calidad, lo que esta vez se intentó cambiar. “Seguramente va a haber menos votos, no vamos a llegar a 50.000, pero vamos a aprovechar la votación muchísimo mejor, porque vamos a empezar a trabajar el 5 de noviembre con los jóvenes que salgan electos para que aporten al partido y se creen nuevos dirigentes, y que eso se convierta en 2019 en cargos electivos”, remarcó.
En la misma línea, la fundadora del Movimiento Alba Roballo, de Batllistas Orejanos, Patricia Soria, opinó que en esta oportunidad no se va a apostar tanto a la cantidad de electores, sino a abrirles las puertas a nuevos militantes, y comentó que otra gran diferencia es que los dirigentes de peso no han tenido una influencia directa en la organización.
“Al no estar bien definidas las precandidaturas, esta elección no va a funcionar como una preinterna, como pasó en votaciones anteriores, sino que nos va a ayudar a fortalecer el aparato militante. Creemos que este año va a bajar un poco la participación, justamente por esto de no tener precandidatos establecidos, y también porque las encuestas muestran que el PC no ha levantado electoralmente”, sostuvo, aunque prefirió no vaticinar ninguna cifra.
Por su parte, Matías Barreto, candidato por Espacio Joven, que es la agrupación juvenil de Espacio Abierto, señaló que esta va a ser una elección muy particular porque, al no haber candidatos claros, “es un lindo momento para marcar la fuerza que cada sector tiene”. Igualmente, admitió que la ausencia de candidaturas de cara al 2019 también puede jugar en contra, puesto que hace que la gente no se arrime de la misma forma al partido.
“Si bien pasa eso, también apuntamos a una elección de calidad y no tanto de cantidad. No aspiramos a sacar más votos que en la pasada, sino más bien a que los jóvenes que ingresen a las Convenciones participen de los órganos partidarios y que puedan hacer propuestas”, afirmó.
Juan Andrés Fernández, postulante por la juventud de Batllismo Abierto, del diputado Ope Pasquet, explicó que en un momento en que el PC se está reorganizando, su líder les trasmitió que en una elección de jóvenes no necesariamente debe haber una correlación directa entre los dirigentes adultos y los grupos juveniles. Es por esto que su agrupación participará con el sublema Espíritu Nuevo, también conformado por mucha gente de Vamos Uruguay, pero que no responde al liderazgo de dicho sector.
Añadió que la falta de candidatos en el partido puede tener un doble efecto: “Puede repercutir positivamente, porque nos permite más independencia, pero también puede hacer que la gente se desoriente, sobre todo en esta época, donde la política se ha vuelto mucho más personalista y las personas pesan más que los grupos o las propuestas”.
Más preparados
De todas maneras, pese a que la votación probablemente será menor, los dirigentes coincidieron en que lo positivo de estas elecciones es la mejor preparación de los jóvenes que forman parte de la colectividad política.
Según Campo, el partido no se preocupó por la formación de los chicos que participaron en la instancia juvenil pasada, a diferencia de lo que ocurre ahora, que “los jóvenes que ingresan están convencidos de ser colorados y saben que vienen solamente a dar militancia, a dar el corazón, porque el PC está en una situación difícil”.
En tanto, Barreto, que estimó la votación entre 10.000 y 20.000, aseguró que los jóvenes que están participando de la militancia activa, están mucho más preparados tanto desde lo ideológico como desde lo político en comparación con la vez anterior, donde había más cantidad, pero no tenían el mismo compromiso que tienen hoy.
Lo que se elige
En estos comicios, para los que hay más de 200 listas y más de 4.500 candidatos, se van a elegir 100 convencionales nacionales jóvenes y un quinto de cada Convención Departamental. Ellos tendrán los mismos derechos y obligaciones que los adultos electos en la interna de junio de cada período. Después se realizará una elección de segundo grado, tanto en lo nacional como en los 19 departamentos, para elegir dos miembros plenos del Comité Ejecutivo Nacional y los departamentales.