Luego del debate entre el candidato frenteamplista, Daniel Martínez, y el nacionalista, Luis Lacalle Pou, CRÓNICAS consultó al politólogo Antonio Cardarello y a la directora de Cifra, Mariana Pomiés, acerca del impacto que causó el encuentro en el electorado. Ambos profesionales coincidieron en que los debatientes hicieron sus presentaciones para sus votantes.
Una hora antes de comenzar el debate, el senador del Partido Nacional, Jorge Larrañaga, expresó en Informativo Sarandí que si el debate era de “guante blanco”, perderían los dos. Por otro lado, la vicepresidenta, Lucía Topolansky, anticipó que sería un debate aburrido porque ya se sabía qué iban a decir. De esa forma se fue gestando la previa del primer debate entre presidenciables -con chances reales- después de 25 años.
La confrontación de ideas entre el candidato frenteamplista, Daniel Martínez, y el nacionalista, Luis Lacalle Pou, comenzó por la economía, luego fue el turno de la seguridad, el desarrollo humano, el futuro, y culminó con un breve mensaje final.
En el desarrollo del encuentro, los compañeros de partido de los candidatos se manifestaron en las redes. Mientras desde el oficialismo se acusaba a Lacalle Pou de no tener propuestas y solo atacar, al representante del Frente Amplio (FA) se le imputaba que defendía un gobierno lleno de fracasos y sin autocrítica.
El día después
En diálogo con CRÓNICAS, la directora de Cifra, Mariana Pomiés, señaló que no consideró que el encuentro tenga un gran impacto en los votantes, ya que cada uno le habló a sus convencidos.
Por otra parte, el politólogo Antonio Cardarello, explicó a CRÓNICAS que por la experiencia en otros países, el impacto en los indecisos es marginal. Al igual que Pomiés, mencionó que ambos presidenciables le hablaron a su público.
Asimismo, señaló que ambos candidatos salieron favorecidos por el debate, porque dieron la sensación de que serán quienes se disputen la Presidencia en el balotaje. Agregó que se dimensionó demasiado el impacto que tendría.
Repercusiones entre pares
Luego de terminado el debate, los candidatos que se expresaron acerca de lo acontecido en los estudios de Canal 4 fueron Pablo Mieres y Guido Manini Ríos.
El candidato del Partido Independiente describió que fue un debate con respeto y valioso, aunque con varios temas ausentes. Agregó que fue pobre en la discusión económica, y sobre Martínez expresó que tuvo que defender un gobierno que fracasó y eso se notó mucho.
A su vez, el candidato de Cabildo Abierto indicó que fue un debate sin propuestas claras, en el que no se habló de la corrupción, ni del derrumbe del país productivo. Además, tampoco se plantearon soluciones a los problemas reales de la gente, argumentó. Asimismo, señaló que el cambio que necesita la gente es su partido.
Ernesto Talvi, por su parte, que días antes se había mostrado en desacuerdo con que no participara del debate, expresó públicamente que «faltó el mapa del futuro». Además, criticó a Gustavo Leal -a quien Martínez señaló como el futuro Ministro del Interior si gana las elecciones-, diciendo que el sociólogo está asociado con un fracaso del que es parte. “Se les terminó el crédito, le tocó el turno a otros para tratar de sacar al país de esta decadencia», sentenció el candidato del Partido Colorado.
Opinaron las redes
Diversos actores políticos siguieron el debate en directo y dieron su opinión en Twitter.
Desde el oficialismo se apuntó a que el candidato nacionalista no tenía propuestas propias y por eso realizaba críticas al gobierno.
Por otro lado, desde la oposición se alentó a su candidato, expresando la solvencia en el discurso.
La precandidata a presidenta, Carolina Cosse, al referirse a la primera parte del encuentro, dijo que la impresión que le quedó fue que hubo un proyecto progresista sometido a ataques y ninguna propuesta, en clara alusión a la exposición de Lacalle Pou.
El diputado nacionalista, Pablo Abdala, escribió: «Falta un bloque, pero el debate ya demostró que la alternancia es necesaria. Que en la democracia los ciclos se cumplen, y deben dar paso a uno nuevo. Y que en Uruguay el cambio es inevitable».
Al finalizar el encuentro, Juan Sartori, criticó al FA expresando que es un modelo que busca justificar sus errores y tiene falta de autocrítica, mientras que desde el lado del nacionalista se ve el cambio con propuestas serias y sabiendo hacia dónde deben ir los esfuerzos.
Por otro lado, Mario Bergara expresó que las propuestas brillaron por su ausencia y que quedó claro quién está a la altura del desafío presidencial.