En entrevista con CRÓNICAS, la directora de Cifra y socióloga, Mariana Pomiés, y el politólogo Daniel Buquet expresaron que la coalición de gobierno pasa por momentos turbulentos. Asimismo, Pomiés indicó que la forma en la que el presidente Luis Lacalle Pou comunicó la salida del ministro de Ganadería, Carlos María Uriarte, “no fue la más acertada”. En esa misma línea, el politólogo dijo que el mandatario busca que “el asunto genere menos revuelo” al anunciarlo un domingo.
Hace algunas semanas, el politólogo Adolfo Garcé afirmaba, en diálogo con CRÓNICAS, que la coalición “está bien de salud”. El domingo pasado, no obstante, el presidente Luis Lacalle Pou anunció la salida del ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Carlos María Uriarte.
Consultada al respecto, la directora de la encuestadora Cifra, Mariana Pomiés consideró que “no es la forma más acertada” informar sobre la renuncia de un ministro en twitter (como ya ha pasado en casos anteriores, como con el extitular del Ministerio de Desarrollo Social, Pablo Bartol). Para el politólogo Daniel Buquet, por su parte, el presidente Luis Lacalle Pou busca “que el asunto genere menos revuelo”.
En diálogo con CRÓNICAS, ambos politólogos evaluaron la salida de Uriarte de la administración, además de dar su opinión sobre el actual estado de la coalición multicolor.
Del ministerio a la estancia
Según Buquet, el cese de Uriarte del MGAP “es una noticia que se puede traducir en que el gobierno no termina de consolidarse”. A su entender, además, “está claro” que fue una destitución ya que el propio Uriarte se mostró sorprendido por la decisión. “No fue una salida pacífica, acordada y mucho menos por iniciativa del propio ministro”, puntualizó el profesional.
En la misma línea, la directora de Cifra opinó que no está segura que el cambio sea positivo, e insistió en que la forma en que se dio la salida no fue la mejor.
En su opinión, el nombramiento o cese de un ministro son hechos políticos importantes y que tienen sus consecuencias y sus causas.
“Históricamente se le ha dado otro peso. Hacerlo de esa forma –anunciarlo vía twitter- no ayuda mucho a mantener cierta tradición. Aunque es bueno innovar, no sé si esa innovación es tan buena”, sopesó.
Sin embargo, para Buquet este cambio fue un problema de desempeño de parte de Uriarte y, como tal, no lo vinculó a problemas en la coalición.
Pomiés, por su parte, comentó que “no tiene claro” por qué se fue el ahora exministro, por lo que no supo a qué atribuirlo, pero sí sostuvo que este caso “no parece ser un ejemplo” de que hay negociaciones que implican renovación en los gabinetes.
De todos modos, la experta apuntó que el impacto de este suceso en la imagen del presidente —y de su gobierno— aún no está claro. “No sé cuánta gente se enteró, no sé cuántos sabían quién era Uriarte y menos conocen al que entra -Fernando Mattos-”, expresó.
En el marco de la coalición
“No creo que el Partido Colorado sintiera a Uriarte como un representante del partido”, detalló Pomiés. De hecho, el productor tiene una raíz nacionalista y no colorada.
Según añadió, este episodio no afectó tanto a la coalición en sí, sino que más bien denota una falta de comunicación entre sus miembros.
Sin embargo, según Buquet en el marco de la coalición multicolor, el PC se muestra como el “socio colaborador”, frente a un Partido Nacional (PN) “que actúa de forma muy disciplinada” y a Cabildo Abierto (CA) que “es el socio malo o molesto”.
De esta manera, el partido liderado por Guido Manini Ríos “complica” cuando surgen cuestiones que no están contenidas en el acuerdo programático por el país elaborado por la coalición. Según profundizó el politólogo, aquí es donde CA “manifiesta sus matices”.
En segundo lugar, este actor también plantea sus propias ideas, que no son de recibo del gobierno. “Son planteos para mostrarse públicamente a pesar que casi saben que el gobierno no va a apoyar”, expresó.
Todo esto, continuó Buquet, obliga al PC a “buscar algún espacio de perfilamiento en la medida que otro socio minoritario lo hace”.
A eso se le suma que, independientemente de que tenga ministros o no, “no tiene la figura de peso” (como sí la tiene CA con Manini Ríos) que plantee los temas en la voz del partido. “Sanguinetti lo hace, es un líder de peso, pero es una figura que no tiene proyección a futuro”, reconoció el experto.
Por otro lado, Pomiés se abocó al análisis del rol de CA dentro de la fuerza multipartidaria. Daniel Salinas, jerarca de Salud, es el ministro más popular, al estar al frente de la cartera que lidera la lucha contra el covid-19, recordó la directora de Cifra, y añadió que “las diferencias que puede haber marcado CA no ameritan cambios en los ministerios”.
Asimismo, concordó con Buquet en cuanto a lo planteado en el compromiso con el país. Según Pomiés, cada partido intenta marcar su identidad propia, y en aquellos temas no incluidos en el acuerdo de la coalición cada cual busca marcar su presencia.
“Yo creo que cada uno intenta responder a su electorado marcando su presencia, consolidando su postura y diciendo ‘acá estoy yo y esto lo defiende el gobierno, pero esto a nuestro partido le interesa también’”.
Dicho esto, a la hora de dar un veredicto para la coalición en sí, Pomiés indicó que está “teniendo los problemas previsibles que se veían desde el inicio”, es decir, las diferencias entre los partidos.
Buquet, a su vez, señaló que la coalición “vive períodos convulsos” y “está permanentemente en tensión”. Desde su visión, el Poder Ejecutivo “sigue mostrando problemas de funcionamiento”, lo cual no está relacionado con que los partidos integrantes trabajen armónicamente o no.
Guardarse el cambio
¿Pueden esperarse más cambios en el gabinete de gobierno?
Esta es la pregunta que muchos se hacen luego de las diversas modificaciones generadas en el poco tiempo que esta administración lleva. Para Buquet, la respuesta es afirmativa, evaluándolo desde hoy hasta el fin del período. Pomiés comentó que es esperable que se den en la medida que los partidos comiencen a marcar aún más su identidad y diferencias de cara a las elecciones en 2024.
Ese podría ser el caso, ejemplificó Buquet, de Luis Alberto Heber (actual ministro del Interior) y Germán Cardoso (titular de Turismo). También existen factores que no se pueden prever, profundizó, como cuestiones de salud.
Por último, podría generarse también una renovación, insistió el politólogo, por deterioro de imagen o política pública, ya que un recambio podría implicar una mejora en estos aspectos.