Propuestas de cadena perpetua y participación de las FFAA en la seguridad pública no encuentran adhesiones entre la clase política

La seguridad en tela de juicio

El diputado cabildante Álvaro Perrone propuso discutir la implementación de cadena perpetua en Uruguay tras una serie de hechos violentos en el país y abogó por una fuerte señal contra la delincuencia. Paralelamente, el senador nacionalista Jorge Gandini, planteó que las Fuerzas Armadas presten «una función auxiliar» a la Policía en el área metropolitana. Ambas propuestas fueron criticadas por actores de la oposición y el oficialismo, argumentando falta de estudios y de consenso político, como posibles riesgos legales y confusiones en las competencias de los ministerios de Defensa y el Interior.

El jueves de la semana pasada, el diputado de Canelones por Cabildo Abierto (CA), Álvaro Perrone, se expresó en su cuenta de X (@APerrone510) a raíz del asesinato de un niño de ocho años en Malvín Norte: “Otro triste día, urge desplegar con mayor firmeza en el territorio a las fuerzas de seguridad. También es hora de discutir sobre la cadena perpetua en Uruguay”, escribió. Tan sólo un día antes, fue noticia que el senador por el Partido Nacional (PN) Jorge Gandini, planteó al presidente Lacalle Pou que las Fuerzas Armadas (FFAA) presten “una función auxiliar” a la Policía en el área metropolitana. 

En cuanto a su propuesta, Perrone expresó su rechazo a la idea de reinserción en algunos casos específicos, y comentó en Canal 10: “A esa gente del mundo del narcotráfico, yo no los quiero en sociedad (…) Sé que no es la solución, pero es un tema de justicia”. En radio Sarandí, agregó que es necesaria «una señal fuerte» en contra de la delincuencia y el narcotráfico. La cadena perpetua es una condena que varía significativamente en los países que la permiten, se manejan distintos conceptos, con diferentes duraciones y posibilidades, como la libertad condicional luego de un cierto período de tiempo. El diputado trabajará en la interna de su partido con un asesor para comparar legislaciones en países vecinos y definir los tipos de delitos que merecen cadena perpetua. A pesar de ello, manifestó que en la etapa que transcurre el actual gobierno, “no hay muchos cambios importantes que se puedan lograr en materia de seguridad”.

Sobre la propuesta de Gandini, ésta fue expresada al presidente en la Torre Ejecutiva, para luego ser comentada en rueda de prensa. A partir de la sustitución de Luis Alberto Heber como ministro del Interior, dijo que con la gestión de Nicolás Martinelli ve a los mandos policiales “con mejor disposición”, aunque existen “problemas nuevos que requieren respuestas nuevas”. La idea es que el Ministerio del Interior pueda contar con las Fuerzas Armadas para “una función auxiliar a la de la Policía”, y “aunque no pueden tener tareas de represión, la sola presencia da buenos resultados” porque “imponen una autoridad que es necesario sostener e incrementar”. El senador remarcó las tareas que ya cumplen los militares en las cárceles, la frontera y los puestos de control de la Aduana, por lo que también podrían “hacer un aporte” en los barrios que requieren mayor presencia del Estado. “Admito que es un tema discutible. Sé que esto no le gusta ni a la Policía, ni a los militares, ni a muchos políticos, pero mucha gente nos pide que pongamos recursos preparados y prestigiosos que tenemos al servicio de la paz”, puntualizó. 

Rechazos

Ambas propuestas fueron rápidamente rechazadas tanto por actores de la oposición como del oficialismo. El diputado de Colonia por el Frente Amplio (FA), Nicolás Viera, dijo a CRÓNICAS que “no hay estudio” detrás de las propuestas, y “mucho menos” existe un consenso político para efectuarlas, sabiendo que “esas iniciativas fracasaron en el mundo entero”. Agregó que la pena de cadena perpetua está prohibida por la Constitución de la República, y que “no tiene ningún sentido práctico”, ya que “hoy en día la pena máxima es de 30 años de cárcel más 15 años de medida de seguridad”, por lo que se pregunta cuál es la idea de cadena perpetua para el diputado Perrone. “Me preocupa mucho la inmadurez de algunos actores del sistema político, de salir al golpe del tarro respecto a situaciones tan dramáticas como son los homicidios. Reafirman más un perfilismo en año electoral que querer resolver el planteo de fondo. Además, se banaliza la forma de proponer. Me parece muy peligroso que se realicen por Twitter cuando el Uruguay tiene instituciones sólidas desde el punto de vista democrático para poderlas plantear”, puntualizó.

En cuanto al oficialismo, una nota de El País dio a conocer algunas de las posturas. Guido Manini Ríos de CA –del mismo partido que Perrone- resumió que la cadena perpetua “no es la solución a los problemas de seguridad”. Pablo Mieres, ministro de Trabajo y Seguridad Social por el Partido Independiente (PI), entendió “la reacción emocional que genera la barbarie que ocurrió”, pero que los políticos deben saber superarlo y “tomar distancia”, teniendo en cuenta que el Estado “hace años” que eliminó la cadena perpetua, lo que fue “un camino correcto” ya que esta medida “niega la posibilidad de rehabilitación”. Como voz aislada del Partido Colorado (PC), el exfiscal Gustavo Zubía opinó que se podría analizar “una cadena perpetua revisable”, ya que fue propuesta en el plebiscito -sin éxito- promovido por Jorge Larrañaga antes de fallecer. 

Con respecto a la propuesta de Gandini, el diputado frenteamplista Viera expresó que las tareas del Ejército están conferidas por ley, “son estrictamente apegadas a un mecanismo puntual”, por lo que “es un peligro” darle tareas que la ley no ampara. Ante la propuesta de la cabildante Rosanna de Olivera, expresidenta del Instituto Nacional de Inclusión Adolescente (Inisa), de darle especial participación a las FFAA en las tareas de Inteligencia para apoyar a la Policía, Viera aseguró que también se trata de un error porque el Estado cede al Ejército la seguridad externa del país y a la Policía, la seguridad interna. “Cada uno desarrolló su sistema de inteligencia”, razonó. El diputado también fue crítico con la gestión actual del Ministerio del Interior. “Al PADO -Programa de Alta Dedicación Operativa- le dejaron el nombre pero le cambiaron el rol. Actúan a demanda sobre un hecho puntual, no se planifica el accionar estratégico como antes”, afirmó. Mencionó además que el FA ya planteó a Martinelli que hay falta de continuidad con cada cambio de gestión, y que la problemática es social, por lo que debe trabajarse de manera transversal en todas las áreas del Estado. “Podemos discutir hasta mañana si hay un muerto más o uno menos, el problema es que hay muertos. No siento que en año electoral el sistema político tenga la madurez suficiente, los acuerdos tienen que darse lejos de las luces electorales para que nadie haga ningún cálculo que no sea buscar la mejor sociedad que podamos”, puntualizó.

La propuesta de Gandini fue rechazada por el propio Perrone y por otros actores del CA. Según la nota de El País, Manini Ríos se expresó en contra. “No estamos de acuerdo con militares patrullando las calles (…) No es su función, no tienen la preparación ni el armamento apropiado para ello”, expresó. Mieres, por su parte, opinó que “cada vez que se le dio entrada a los militares” para tareas similares, el resultado “no fue bueno”. Laura Raffo -candidata a la presidencia por el PN- tampoco compartió, aunque su propuesta es que 1.000 funcionarios del Ministerio de Defensa pasen al cuerpo de la Guardia Republicana, pasando antes por un período de formación.