En diálogo con CRÓNICAS, los politólogos Antonio Cardarello y Victoria Gadea sostuvieron que la propuesta de crear 1.000 puestos de trabajo temporales de la IM podría jugar a favor del Frente Amplio de cara a las elecciones municipales. Sin embargo, sostuvieron que no es tan claro que la iniciativa beneficie únicamente a Martínez -por su administración de la comuna antes de la renuncia por su candidatura presidencial- ni que pueda inclinar la balanza a su favor por encima de Cosse o Villar.
La semana pasada, la Intendencia de Montevideo (IM) abrió un llamado de 1.000 puestos de trabajo temporales. La medida llegó como respuesta a la pandemia que azota al país y dejó a miles sin ingresos, y está enfocada para personas de entre 18 y 64 años que no perciban otra fuente de salarios.
En diálogo con CRÓNICAS, diversos politólogos se refirieron a la iniciativa y gran parte del análisis giró en torno a si la medida beneficiaría más a la candidatura de Daniel Martínez, ya que la que está al frente de la comuna es su administración -liderada ahora por Christian Di Candia- y es la que impulsó este llamado.
Ante ese escenario, tanto Victoria Gadea como Antonio Cardarello cuestionaron la idea de si este impulso al empleo favorecería solo al exintendente por encima de sus compañeros candidatos del Frente Amplio (FA).
En opinión de Cardarello, podría suponerse que cualquier política que active el empleo implicaría favorecer al partido que está en el gobierno en un momento próximo a la disputa de elecciones; sin embargo, indicó que el hecho de que la iniciativa favorezca directamente a Martínez “no está tan clara”.
Gadea, por su parte, indicó que la iniciativa del actual intendente de Montevideo podría generar algún efecto positivo sobre la candidatura de su predecesor, aunque, remarcó, quizás es una propuesta que podría ser reconocida como parte del frenteamplismo.
“No sabemos si esa decisión va a mover a los electores dentro de la terna frenteamplista o simplemente va a conservar a los votos que ya tenía dentro del lema”, reflexionó la politóloga.
En lo que sí concordaron ambos entrevistados es en que la interna del FA de cara a los comicios departamentales se muestra muy competitiva entre Daniel Martínez, Carolina Cosse y Álvaro Villar. En este contexto, Cardarello consideró que “es difícil de saber” a qué candidato en particular favorecería la medida impulsada, mientras que Gadea evaluó que no cree que “determine o incline la balanza en favor de Martínez por encima de los otros candidatos”.
Por su parte, la socióloga y directora de Cifra, Mariana Pomiés, consultada también sobre el tema, indicó que el impulso a los empleos tiene un impacto bajo en el conjunto de la población en la ciudad.
Preocupación ciudadana
A su vez, los expertos se refirieron a una encuesta publicada por Cifra sobre las principales preocupaciones de los uruguayos y cómo esto puede incidir en las elecciones municipales.
Según el relevamiento, la economía (41%) es el principal problema de los uruguayos. Esto, a su vez, se divide en cuatro subsectores: la desocupación y el cierre de empresas (31%); la situación económica del país (9%); los precios altos e ingresos bajos (4%); y la pobreza (2%). Le siguen en el podio la salud, con un 26%, y la inseguridad, con 22%.
En ese contexto, Pomiés indicó que en sí no son temas “propiamente municipales”, aunque los candidatos “intentan mostrar sintonía con eso”. Además, reconoció que se hace más difícil para las campañas poner el tema de las preocupaciones de los uruguayos arriba de la mesa. Añadió que esto se da más aún en Montevideo, ya que en el Interior las intendencias tienen un vínculo un poco más cercano a la ciudadanía y se vinculan más al empleo de la gente. Consideró, a su vez, que las comunas siempre fueron generadores de empleo, por lo que “ahí sí que se puede estar más realísticamente con propuestas cercanas a la población”.
Gadea, por su parte, profundizó que en Montevideo los principales problemas seguramente puedan afectar un resultado electoral, pero no de manera contundente. Esto se debe a que se trata de demandas que la gente le está haciendo al gobierno nacional y no tanto a los gobiernos departamentales.
Cardarello, en tanto, observó la realidad por intención de voto. En la encuesta, un 46% de quienes votaron al FA en 2019 consideraron que el principal problema es el económico, ante un 38% de la coalición. A su vez, el segundo problema para los votantes del grupo liderado por Luis Lacalle Pou es la inseguridad, con un 29%, mientras que para los de la oposición es el tercero (detrás de salud), con un 17%.
“Si lo pensamos en el caso de Montevideo, donde mejor votan los seguidores de la coalición es en la zona de la franja costera, y ahí parece claro que es donde la inseguridad es un motivo importante de preocupación, mientras que para los sectores del cinturón de Montevideo el tema de la economía parece fundamental, y es ahí donde el FA tiene mayor intención de voto”, concluyó Cardarello.
