El presidente de la Confederación Empresarial del Uruguay (CEDU), Alfredo Freitas, conversó con CRÓNICAS sobre los principales problemas de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes). El empresario expresó su preocupación por la insuficiente inversión que recibe este sector, así como las dificultades que persisten en el comercio del interior del país. Además, adelantó que el 21 de junio se realizará un evento con la participación de todos los centros comerciales del país para discutir y priorizar puntos claves que serán presentados a los candidatos presidenciales, con un cierre de la mano del presidente de la República, Luis Lacalle Pou.
-¿Cómo ha sido su paso hasta ahora como presidente del CEDU, luego de la retirada de Vera Facchin?
-Hace más de 10 años que estoy en CEDU, la conozco muy bien. Cuando se fue Vera, he ido tratando de ponerle mi impronta. Todos tenemos una, ni mejor ni peor, diferente. También estoy tratando de continuar algunas cosas y priorizar otras. Basamos nuestra expectativa en lograr que el público y los políticos visualicen la importancia real que tenemos las mipymes en el Uruguay, y lo poco que se invierte en ellas frente al resto de las empresas. Si no bajamos a lo que realmente somos y la importancia que tienen los pequeños comercios, no vamos a poder sacar a Uruguay adelante. Eso es algo que no se ha logrado en ningún gobierno de manera efectiva, salvo en el trabajo que hace ANDE. Eso sí lo destaco en gran medida, lo reconocemos y lo queremos profundizar.
-Ya que estamos en período electoral y menciona a los políticos, ¿están buscando voluntad política en uno de los precandidatos para cumplir esas expectativas?
-Estamos haciendo algo mucho más grande. El 21 de junio tendremos una reunión de todos los centros comerciales del interior del país, socios de CEDU y algunos no socios, donde cada uno tiene que llevar tres puntos principales a tratar para poder bajarlos a tierra y hacer un proyecto. Esperamos que luego de las internas a fin de mes podamos hacer una reunión con los cinco candidatos juntos para que den su punto de vista, luego de hacerles llegar los planteos por medio de los diputados invitados a la reunión. Creemos que esa es la forma de realmente ponerlo en tapete a nivel nacional. Dentro de esos candidatos va a estar el presidente y algún ministro, sin duda. Si los hacemos comprometerse en una gran exposición con un moderador importante y con una amplia trasmisión, puede ser un antes y un después para las mipymes.
-¿Cómo se llevará adelante esa primera reunión de junio?
-El evento va a estar dividido en dos partes, una será exclusivamente gremial, donde todos los centros comerciales planteamos tres puntos cada uno, y habrá economistas que trabajarán con nosotros para elaborar los seis puntos definitivos. Después de eso tenemos tres charlas pactadas sobre temas fundamentales, la primera con el contador Rodrigo Coutinho sobre la ley de inversión que existe actualmente con la Comap. Hemos contratado un equipo para que haga un estudio de forma que pueda ser mejor utilizable para las mipymes. El otro punto se llama plataforma de digitalización del ecosistema minorista, donde le pedimos a Leonardo Loureiro que haga un proyecto para tratar de mejorar el comercio minorista a nivel nacional, y allí presentará medios de pagos, apps y tarjetas para las mipymes. Para la última parte, la economista Carmen Sánchez dará los números que corroboran la importancia de las mipymes y del trabajo que ha hecho ANDE. Luego el presidente de la República hará un cierre, y después habrá un almuerzo.
-¿Qué desafíos está detectando que es necesario enfrentar de aquí a los años venideros?
-Tenemos que concretar ideas que se vienen manejando desde directivas anteriores como las políticas de frontera, los intereses en las tarjetas de crédito, los costos ocultos, las compras de las intendencias en sus localidades y la bromatología nacional. Por otro lado, hay desafíos que tienen mucho que ver con la formalización de las pequeñas empresas, y creemos que lo podemos lograr a través de las ideas que nosotros tenemos para presentar, principalmente los proyectos de inversión.
-Menciona las políticas de frontera. ¿Piensa que la realidad del comercio en el litoral con Argentina se normalizó luego de las mejoras en el tipo de cambio?
-Solo los que estamos en la frontera conocemos la realidad, el resto del país
no la conoce. En este momento no ha cambiado, estamos en una situación muy compleja, hace una semana la Universidad Católica presentó un informe donde se dice que la diferencia de precio con Argentina subió nuevamente. La gente piensa que nosotros ya estamos salvados porque allá está más caro que antes, y no tienen ni idea de que en Salto el mes pasado cruzaron más de 100.000 personas para el otro lado. Hemos contratado a empresas de economistas para que nos ayuden a plantear mejor el problema.
-Más allá de la frontera, ¿qué matices está viendo en el resto de los departamentos?
-Nosotros dividimos al Uruguay en zonas. La primera gran división es entre Montevideo y el interior. Hay 210.000 mipymes, cerca del 46%, 98.000 o más, están en Montevideo, y en el interior hay 53%, unas 111.000. Otra división grande sería Maldonado, Canelones, Montevideo y Colonia con el resto del país, y otra es la frontera con Brasil y Argentina. Cada una de ellas te muestra países totalmente diferentes. Somos conscientes de que es difícil atacar los problemas de todos, pero nuestro trabajo como responsables de los centros comerciales del interior es hacer visibles las diferencias reales que existen. Tacuarembó es uno de los departamentos que más sufre el contrabando, pero no se lo incluye nunca en las políticas de frontera. Soriano, por ejemplo, tiene un problema muy grande en las políticas con el combustible, que existen sí en Río Negro, pero no allí, y están pegados. Hay que abrir la cabeza y buscar que las soluciones sean para todos, que no sea algo que al gobierno no le cueste, sino que le brinde soluciones.