Para Matilde Morales de PwC las cuentas públicas son “uno de los principales desafíos de la política económica, mientras que el economista Ignacio Munyo opinó que “la historia se empieza a complicar de ahora en adelante”, ya que estima un menor crecimiento de la actividad económica respecto a los pronósticos oficiales. Agregó que para reducir el déficit, el gobierno debería “hacer una microcirugía” en la rendición de cuentas hilando en “los gastos finos de funcionamiento”.
Por Ricardo Delgado | @ricardo_dl e Ignacio Palumbo | @ignacio_palumbo
Los números del sector público están lejos de mostrar una mejora y el objetivo de cerrar el período de Gobierno en un 2,5% del Producto Interno Bruto (PIB) parece cada mes más lejano. Munyo, académico que además asesora a Luis Lacalle Pou en materia económica, concuerda en la dificultad de lograr la meta, afirmando que su proyección de crecimiento para la economía es de 1,5% para este 2018. “Es muy complicado”, estimó.
“La recaudación en el Uruguay está atada casi en su totalidad en una relación 1-1 con el nivel de actividad económica” | Ignacio Munyo
De acuerdo a los últimos datos divulgados por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), el resultado del sector público consolidado arrojó un déficit de 4% del PIB en el año móvil cerrado a mayo, lo que implica un deterioro de casi cuatro décimas de punto respecto al resultado de abril. Si bien es cierto que el deterioro registrado respecto al mes pasado se debe prácticamente en su totalidad a la acumulación de existencias de crudo de Ancap, lo cierto es que el rojo en las cuentas públicas no se reduce, a pesar de las medidas adoptadas por las autoridades de Gobierno.
En este sentido, el economista aseguró que el Gobierno debe salir en busca de contener el gasto público, “pero hay que hacer una microcirugía” para lograrlo, refiriéndose al cuidadoso nivel de detalle que debe tomar. En efecto, según continuó explicando, “el esfuerzo fácil ya se hizo, no es un esfuerzo para sacar el gasto, ese ya está hecho”. De ahora en más, el Gobierno debe “entrar en detalles y gastos finos de funcionamiento”, puntualizó.
La Rendición de Cuentas presentada el pasado sábado al Parlamento no beneficia la situación, según Munyo. De acuerdo a su interpretación, “la historia se empieza a complicar de ahora en adelante”, ya que el déficit aumentaría dado que se recaudará menos que lo que se espera, porque la actividad va a crecer menos y “el gasto es el gasto”. Como se compromete un aumento fijo del gasto y el economista prevé una actividad económica menor que el Gobierno, el déficit se va a deteriorar. Por lo tanto, para Munyo “la realidad del déficit es neutral con la expectativa” del crecimiento de la actividad económica.
Sin embargo, es importante analizar el déficit teniendo en cuenta el contexto en el que se enmarca, ya que ese 4% “no se lo puede mirar si es mucho o poco de forma aislada”, según aclaró. De esta manera, sostuvo que uno de los principales factores a tener en cuenta es, justamente, la evolución en la actividad económica, “porque la recaudación en el Uruguay está atada casi en su totalidad en una relación 1-1 con el nivel de actividad económica”, informó.
Números rojos
De acuerdo a la información divulgada por el MEF, los ingresos del Sector Público No Financiero se ubicaron en 29,7% del PIB, casi dos décimas por debajo de lo observado el mes anterior. La reducción se debió a una caída de los ingresos del Gobierno Central de casi 0,1% del PIB y a un deterioro en el Resultado Primario Corriente de las Empresas Públicas de magnitud similar, fundamentalmente de Ancap. Por su parte, los ingresos del BPS se mantuvieron estables.
Del otro lado, los egresos primarios del Sector Público no Financiero se situaron en 30,5% del PIB –unos US$ 17.800-, lo que implicó un aumento de 0,3% del PIB con respecto a lo registrado el mes anterior, que se explica en su totalidad por el incremento del stock de petróleo y derivados.
De acuerdo a lo dicho a CRÓNICAS por Matilde Morales de PwC, ello implica un incremento del gasto de seis puntos del PIB desde el menor nivel alcanzado en 2004. Este aumento, detalló, se debe principalmente al denominado “gasto social” que incluye las transferencias por la reforma de la salud (Fonasa), seguro de desempleo, asignaciones familiares y otras prestaciones, y transferencias a las AFAPs.
Para la economista, “el resultado de las cuentas públicas y el deterioro en el ratio de endeudamiento” constituye “uno de los principales desafíos de la política económica”.
“El resultado de las cuentas públicas y el deterioro en el ratio de endeudamiento” constituye “uno de los principales desafíos de la política económica” | Matilde Morales
Morales destacó que si bien Uruguay mantiene el grado inversor para su categoría de deuda y coloca con éxito títulos tanto a nivel local como internacional, hay una contracara al aumento del déficit: la suba de la deuda. La deuda del Gobierno Central aumentó 10 puntos del PIB en los últimos tres años, pasando de 38% en 2014 a 48% en 2017, elevándose la deuda total a 65,5% del PIB al cierre de 2017.