Ómnibus y taxis de todo el país dispusieron de unos US$ 500.000 para cumplir con las condiciones sanitarias dispuestas por el gobierno nacional con el fin de evitar la propagación del Covid-19. Así lo afirmó a CRÓNICAS el presidente de la Cámara del Transporte del Uruguay, Juan Salgado.
En la misma línea resaltó que el sector del transporte está enfocado en ofrecer el mejor servicio posible en este escenario y no en su situación financiera: “Por ahora no quisimos hacer planteos que estén fuera de tiempo”, aseveró el también presidente de la empresa Cutcsa.
Por María Noel Durán | @MNoelDuran
El retorno a la actividad tras la Semana de Turismo representó un nuevo desafío para el sistema de transporte. Durante la también llamada Semana Santa, las propias empresas de transporte replicaron el mensaje del gobierno que exhortaba a trasladarse únicamente en caso de desempeñarse en servicios esenciales como salud, policía o bomberos.
“Se ofreció un 40% de las unidades, esto ascendió al 60% el lunes luego de turismo dado que sabíamos que, como máximo, la actividad se incrementaría en un 10%”, explicó el presidente de la Cámara del Transporte del Uruguay, Juan Salgado a CRÓNICAS.
Este incremento finalmente fue del 7% y se justifica, según Salgado, por el regreso a la actividad de los trabajadores de la construcción, que en gran medida hacen uso cotidiano del transporte colectivo.
Asimismo, las empresas de transporte prestan especial atención a cumplir con los servicios que son utilizados día a día por los funcionarios de la salud. “Tuvimos en cuenta los horarios más complejos como la entrada y salida de las 12 de la noche y la de las 6 de la mañana y las zonas de mutualistas y hospitales”, apuntó y resaltó: “No solamente es importante hablar del porcentaje de servicio durante el día, porque no es lineal”.
En la misma sintonía se toman en cuenta los recorridos más utilizados por el personal de la construcción a sabiendas de su retorno a la actividad.
“Percibí hoy que quizás alguna gente aflojó”, dijo el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, en conferencia de prensa el pasado lunes13 haciendo alusión al acatamiento del confinamiento voluntario al que el gobierno exhorta desde que arribó el Covid-19 al Uruguay.
Según Salgado, este flujo de personas que se volcaron a las calles luego de la Semana de Turismo no se reflejó en el uso del transporte colectivo. “Se vio mucho movimiento en Montevideo pero creo que fue de cercanía, no repercutió en el transporte”, sostuvo.
En los hechos, la caída del transporte- a nivel general en todo el país- ronda el 80%. “Fue una caída estrepitosa desde el 13 de marzo en adelante”, reflexionó Salgado y añadió que esta cifra contempla ómnibus, del Interior y urbanos, frecuencias de corta, media y larga distancia y taxis. “En algunos, como el transporte escolar o turístico, la caída es del 100%”.
De todas maneras, “en la mesa de trabajo del transporte no está para nada contemplado el tema económico a la hora de cumplir el servicio”, reconoció el presidente de Cutcsa. “El único criterio valido que se coordina con la Intendencia de Montevideo y el Ministerio de Transporte y Obras Públicas es el de la responsabilidad social de dar locomocióny no crear un problema más”, estimó.
Consultado acerca de si el gobierno le ha brindado a las empresas el respaldo financiero necesario, Salgado apuntó que el tema central en este mes fue la higiene y garantizar que los habitáculos cumplieran con los protocolos de limpieza.
“Por un lado, baja el 80% la cantidad de pasaje, a la vez, estamos dando un 60% de oferta para un 20% de demanda, pero además, el costo de servicio es mucho más caro a causa del protocolo de limpieza”, consideró.
Consultado acerca de cuánto invierte el sector en que las unidades cumplan con las condiciones sanitarias dispuestas por el gobierno, Salgado detalló: “Ómnibus y taxis de todo el país invirtieron una cifra cercana a los US$ 500.000 en este primer mes”. Salgado explicó que, en el caso de Cutcsa, hay dotaciones especialmente equipadas para limpiar las unidades en cada trayecto; disposición que también llevan a cabo todas las demás empresas de transporte.
Sin embargo, y más allá de algunas flexibilidades que los bancos han tenido con las empresas de transporte ante este escenario de vulnerabilidad, Salgado apuntó que el sector “no ha profundizado en ningún aspecto económico”, sino que se ha abocado a cubrir el servicio de la mejor manera y a trabajar en la optimización de las medidas sanitarias.
“La gran incógnita es cuándo será el día después, que va de la mano con lo sanitario. Cuando eso se sepa, podremos ver cómo salimos financieramente. Por ahora no quisimos hacer planteos que estén fuera de tiempo”, finalizó.