La Intendencia de Florida comenzará, en los próximos meses, la construcción de la planta de clasificación y transferencia de residuos en Sarandí Grande para el correcto reciclado de desechos, en una iniciativa junto al Ministerio de Ambiente para erradicar todos los vertederos a cielo abierto del departamento.
Con una inversión de más de un millón de dólares en esta planta, la comuna marca su compromiso en gestión medioambiental, como viene desarrollando desde hace 14 años, al cerrar su principal vertedero, ubicado en la ciudad de Florida, y luego continuar con el cierre definitivo de los vertederos de Casupá y Sarandí Grande.
El edificio, que tendrá una superficie de 300 metros cuadrados y playas de maniobras de 600 metros cuadrados para tránsito de camiones y recolectoras, dará trabajo a entre cinco y 10 personas de la zona en las tareas de clasificación y almacenaje de residuos, según estimó el intendente de Florida, Ing. Guillermo López.
La planta, que estará equipada con maquinaria de última generación, tendrá una cinta de clasificación que permitirá retirar y posteriormente prensar los materiales valorizables para dar un nuevo uso a estos residuos y reducir lo que se envía a la disposición final.
Luego de clasificados, los residuos no valorizables serán conducidos a un contenedor y transportados por un camión adaptado para el transporte de los mismos.
Los contenedores para almacenaje y transporte de residuos, son en total 10. Tres se utilizarán para el transporte de residuos desde Sarandí Grande hacia Florida y los otros siete serán destinados en forma rotativa a distintos lugares del departamento para asegurar una ordenada recolección de residuos tales como voluminosos, chatarra, escombros y podas.
La construcción de esta nueva instalación permitirá economías en el transporte, traslado y recolección de residuos en la zona noroeste del departamento que se dirigirán a la planta de encapsulado de Florida, que en un futuro podrá permitir la disposición en departamentos vecinos y optimizar costos y capacidades de disposición.
El compromiso de la Intendencia floridense con la gestión medioambiental y la economía circular se ha desarrollado en estos años con la entrega de más de 6.000 contenedores domiciliarios y 600 contenedores comunitarios, que aseguraron que todo el departamento tuviera recolección de residuos, así como llevó adelante políticas de educación ambiental en las escuelas y la entrega gratuita de composteras.
La erradicación de los vertederos a cielo abierto está presente en la agenda como compromiso del gobierno nacional y departamental ya que resultan un foco de contaminación, tanto por la generación de líquido lixiviado (líquido de descomposición) como por la emisión de gases de efecto invernadero y contaminación de suelos y aguas.