En entrevista con CRÓNICAS, el presidente de la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU), hizo referencia a las declaraciones del ministro de Trabajo, Ernesto Murro, en las que expresaba que desde las cámaras no se quería que se hicieran actas de los encuentros. “Hubo actas pero no fueron firmadas porque no reflejaban lo que se había acordado”, explicó el empresario.
Por Romina Peraza | @romiperaza
El pasado mes de junio, se realizó la última conferencia anual de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). En aquella oportunidad, la Comisión de Expertos del organismo instó al gobierno uruguayo a que adoptara acciones para que se diera la aplicación del Convenio 98 que trata sobre el derecho a la sindicalización y la negociación colectiva.
El Poder Ejecutivo debía preparar, en consulta con las cámaras empresariales y el PIT-CNT, una memoria de los lineamientos a seguir para cumplir con el requerimiento del organismo internacional. Finalmente, esa memoria fue enviada por el Ministerio de Trabajo, el pasado viernes 30, apenas 48 horas antes del plazo establecido por la OIT.
En diálogo con CRÓNICAS, el presidente de la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU), Gabriel Murara, al dar su opinión sobre el accionar del gobierno respecto a lo requerido por la OIT, dijo que en las reuniones que se dieron para realizar la memoria, no se avanzó, y esgrimió los motivos. “Para nosotros, un avance significativo era presentar un proyecto de ley con los puntos como dicen los expertos de la OIT, ya corregidos”, comentó. Cosa que, considera, no ocurrió.
Antes del 1º de noviembre el gobierno tendría que enviar las modificaciones finales de la Ley de Negociación Colectiva, que actualmente rige en el país. En cuanto a esto, Murara señaló que lo lógico y normal sería que la ley quedara corregida.
En su opinión, con las relaciones laborales que tienen más de un siglo, el país no se merece tener una ley de negociación colectiva como la actual, que fue modificada en 2006 y que no responde a un convenio de la OIT, como es el Convenio 98.
No está todo tan bien
El pasado lunes, la cartera de Trabajo publicó en su página web que el informe que se envió a la OIT, “detalla las actividades y propuestas realizadas, que insumieron en total cinco reuniones tripartitas, más otros contactos informales con la Cámara de Industrias del Uruguay, la Cámara Nacional de Comercio y Servicios del Uruguay y el PIT-CNT”.
Consultado acerca de cómo fue el diálogo con el gobierno, el empresario expresó que hubo reuniones donde se intercambiaron ideas complejas.
Asimismo, hizo referencia a las declaraciones del ministro de Trabajo, Ernesto Murro, quien indicó que “los empresarios no quieren que se hagan actas de las reuniones».
Murara remarcó que esto no refleja la realidad de lo ocurrido, sino que si bien hubo actas, las mismas no fueron firmadas porque no reflejaban lo que se había acordado. “Ya en la primera reunión, del 26 de junio, la primera acta que vino no reflejaba lo que hablamos”, puntualizó el titular de la CIU.
Según Murara, se le pidió al gobierno que se corrigieran esas actas, pero “nunca existió la corrección”. En ese sentido, el empresario fue tajante: “No vamos a firmar actas que no responden a lo hablado”.
Palabras cruzadas
En declaraciones al diario El País, Murro expresó que «los dirigentes” de la CNCS y de la CIU no quieren hacer las cosas bien» porque buscan «seguir en esta campaña electoral».
En ese sentido, Murara señaló que “hay declaraciones que no ayudan y no tienen nada que ver con la realidad”. En esa misma línea, explicó que este tema tiene 10 años, y que “nadie pidió ni tuvo la prevención de que iba a caer en un momento electoral”.
“Esto tiene 10 años, y si no está corregido es porque el Poder Ejecutivo no hizo los deberes en su momento”, subrayó Murara.