En el marco del primer Foro de Inversión Europea en Uruguay, se alertó por la incertidumbre que genera el nuevo escenario internacional marcado por el incremento de las “tendencias proteccionistas” y cuyo destino –según Enrique Iglesias- “no sabemos bien cual es”. Como respuesta, se instó a concretar de una buena vez el dilatado acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea (UE), ya que son dos regiones que creen “en el Estado de derecho como principio fundamental de creación de nuestras sociedades”, explicó el canciller (i) José Luis Cancela.
Por Ricardo Delgado / @ricardo_dl
En un contexto de gran incertidumbre por el rumbo político de varias regiones del planeta, y el incremento en cantidad (y aceptación ciudadana) de los discursos proteccionistas, es que esta semana se celebró el Foro de Inversión Europea en Uruguay, un evento que busca promover al país como destino de inversiones de empresas del viejo continente, sirviendo además como plataforma para ingreso al Mercosur. Con una importante presencia de autoridades oficiales y empresarios de ambas regiones, se destacó la importancia que tiene alcanzar un acuerdo comercial, no solo por su impacto facilitador de acceso a un nuevo mercado, sino por la incidencia que puede llegar a tener sobre la economía global.
El puntapié inicial del evento que se desarrolló en el Hotel Radisson, lo dieron el embajador de la UE en Uruguay, Juan Fernández Trigo, el ministro interino de Relaciones Exteriores, José Luis Cancela, y el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori.
Fernández Trigo destacó que el comercio y la inversión fueron los dos pilares fundamentales que llevaron a la creación de la UE, primero en un plano económico, pero luego llevándolo a una integración política. En ese sentido, destacó que desde sus comienzos, la política internacional del bloque apuntó en la misma dirección, buscando incrementar el comercio con otros mercados así como también la inversión.
Respecto a Uruguay, destacó el papel que jugó el ministro Astori en la evolución de la economía uruguaya en los últimos años, y a convertir al país en un importante receptor de inversión extranjera directa (IED). Asimismo, subrayó la fuerte presencia empresas europeas en la región y particularmente en Uruguay, donde un 26% de las firmas extranjeras son de origen europeo.
Fernández Trigo evaluó que la negociación de un acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la UE va por un buen camino, con un cronograma ambicioso, y buscando llegar antes de fin de año “a un acuerdo que nos permita incrementar el comercio y la inversión”.
Algo que tenemos en común
Por su parte, el canciller interino, José Luis Cancela, afirmó que Uruguay y el Mercosur son socios estratégicos de la UE, y que la negociación actual es la continuación de un camino iniciado en la década de los 90 cuando el mundo sufría una profunda trasformación. “Es una negociación amplia, ambiciosa, que tiene sin duda un importante pilar comercial, cuya negociación probablemente nos ha llevado más tiempo del debido, que no ha estado exenta de dificultades, pero son dificultades que tenemos el deber y sobre todo responsabilidad de enfocar con fundamentos”, reflexionó.
Asimismo, subrayó que se trata de “una asociación de principios y valores compartidos”. “Aquellas regiones, países, que creemos en el estado de derecho como principio fundamental de creación de nuestras sociedades, en la democracia plena y representativa, en el principio irrenunciable de la libertad, la libertad de expresión, de comercio, de empresa, y también del papel irrenunciable del Estado en la protección de los más débiles, en asegurar el bienestar de los ciudadanos; tenemos el deber, la responsabilidad política, pero también moral de unir nuestros esfuerzos y nuestra cooperación en un mundo que nuevamente ve pujar las tendencias proteccionistas, cuestionar la democracia, ve tendencias que ya aparecieron en el pasado que se presentan bajo nuevas formas pero que pueden poner en peligro la convivencia de las sociedades y también la paz mundial”, argumentó Cancela.
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