Con la mitad de intención de votos que en el 2019 y una estructura acéfala desde que Julio María Sanguinetti renunció a la secretaría general, el Partido Colorado (PC) enfrenta una crisis política “innegable”, oportunidad para un nuevo capítulo con nuevos protagonistas. Sobre el tema, CRÓNICAS consultó a los diputados colorados Ope Pasquet y Felipe Schipani, y al politólogo Mauro Casa, quienes coincidieron en que las encuestas son de poco fiar.
Por: Catalina Misson
Robert Silva, Tabaré Viera, Andrés Ojeda, Gabriel Gurméndez, Guzmán Acosta y Lara, Gustavo Zubía y Carolina Ache, son las cartas que barajan los votantes del Partido Colorado. Para el politólogo Mauro Casa, hay momentos en la vida de los partidos políticos en donde no aparecen liderazgos claros y se dan procesos de fragmentación dentro de los sectores históricos. Allí es cuando se mezcla el mazo y se reparten nuevas opciones.
Siete candidaturas y una crisis política “innegable”, puede significar oportunidad. Para Casa, el costo de entrada al sistema político es bajo, y el premio puede ser grande. Para el PC, se tratarán de unas elecciones internas “muy pequeñas” y con pocos votos es posible ganarse la nominación a la presidencia. Con una campaña de pocos meses, una inversión económica pequeña y un número de votos que permita llegar a la Cámara de Representantes, se logra una “visibilidad enorme” como figura política, en pie de igualdad con el resto de los candidatos, con buena cobertura en la prensa y viajes al interior del país.
La interna
Para el diputado colorado Ope Pasquet, la interna de su partido goza de un ambiente «muy animado», con varios competidores. «Hace tiempo que el PC está en una situación de acefalía política. No sólo tenemos que encontrar un candidato a la presidencia, sino también un líder político, detrás del cual se encolumne todo el partido. Por eso es bueno que a la hora de elegir ese nuevo líder, haya una oferta variada para que la ciudadanía colorada pueda elegir con amplitud aquel de su preferencia, no sólo entre dos o tres», explicó Pasquet. Para su compañero, el diputado Felipe Schipani, también se trata de algo «muy bueno» que «da cuenta de la diversidad del partido».
En cuanto a la relación del PC con el resto de partidos integrantes de la coalición multicolor, ambos diputados coincidieron en la necesidad de mejorar el sistema de coordinación interno: “Yo no estoy satisfecho en la forma que trabajó la coalición”, -reprobó Pasquet-. “El partido lo viene diciendo desde el principio de la gestión, faltó diálogo. De todas formas, se mantuvo pese a los pronósticos de que iba a desaparecer a los 15 días de crearse. Sancionó todas las leyes importantes que había que sancionar, defendió a los ministros cuando fueron interpelados, pero tiene que funcionar mejor en el próximo periodo”, puntualizó.
Según la última encuesta de Equipos Consultores, el 7% del electorado votaría al PC si las elecciones fueran este domingo, mientras que las encuestas de Cifra en 2019 sobre el mes de marzo, le adjudicaban un 14%. En cuanto a la interna actual del PC, la última encuesta realizada por la consultora Radar a la que accedió el semanario Búsqueda, y que fue por encargo de uno de los candidatos, dieron los siguientes resultados: 28% para Robert Silva, un 16% a Andrés Ojeda, un 13% a Gustavo Zubía, 12% a Gabriel Gurméndez, un 6% a Tabaré Viera y un 1% a Guzmán Acosta y Lara. Un 11% optó por no escoger a ninguno de los precandidatos, un 10% no supo qué responder y un 4% no contestó.
Para Casa, el candidato Andrés Ojeda es un claro ejemplo de un político “de segunda o tercera línea” con poca fama entre la población e inexperiencia en un cargo de gobernanza, que puede beneficiarse de estas elecciones. “Está haciendo una inversión económica importante, no sabemos si de su propio bolsillo, y cuenta con la ventaja de destacarse como una figura joven entre la representación sociodemográfica de su partido, que más bien son veteranos de la política”, opinó. Su rol como abogado penalista le ha dado lugar en causas mediáticas, por lo que hace años que busca dicha visibilidad. Dato no menor, cuenta con el apoyo del Foro Batllista, y una base electoral en la política universitaria de la Facultad de Derecho.
A pesar de las ventajas, el politólogo no cree que Ojeda gane la candidatura, porque ”es una elección que se define más por aparato” que “está en otros departamentos del interior del país”. Esto no quita que “quizá entre junio y octubre” pueda acordar con el resto de sectores para “tener un buen lugar en una lista al Parlamento”. El elegido “pareciera ser Robert Silva”, debido a que es el precandidato con más protagonismo en el gobierno presente, ya que llevó adelante la reforma educativa encabezando la ANEP. Para el diputado Schipani, a pesar de que las encuestas son un insumo pero “no la realidad revelada”, los resultados demuestran la delantera de Silva, candidato al que apoya. Pasquet también opinó que la encuesta “no es más que una foto”, pero “se tiene la confianza” de que Silva ganará. Dichas encuestas muestran que el candidato Tabaré Viera, perdió intención de voto, pero para Casa, no vale la pena “hacer análisis con números tan pequeños”. Las internas “tienen un desafío muy grande de medición” por su carácter de no obligatorias, por lo que no se conoce “el universo efectivo” de quienes finalmente irán a votar.
Ache, la séptima
El pasado lunes, la exvicecanciller Carolina Ache presentó su precandidatura con el lema de “Vamos por la justa” y la idea de que el PC necesita de “un candidato colorado, no rosado”. Schipani no compartió la expresión, a la que consideró “un dicho despectivo del Frente Amplio para hablar de blancos y colorados”. No obstante, reconoció su precandidatura como buena. “Me parece que suma. Se trata de una mujer, que además es joven. Debemos saber cuál es su propuesta, pero bienvenidas todas las candidaturas”, declaró. Por su parte, Pasquet coincidió en la bienvenida, pero consideró que los dichos de Ache “son picardías electorales, condimento a las declaraciones, algo propio de una campaña electoral”. Sobre la idea que planteó la precandidata, de unificar propuestas en la interna ya que “no es posible presentar siete programas de gobierno”, ambos diputados rechazaron la iniciativa y consideraron que es algo que debe ocurrir luego de que cada candidato de a conocer su impronta.
Para el politólogo Mauro Casa, Carolina Ache “está viendo una ventana de oportunidad para posicionarse de cara al futuro”. Si bien no cree en la máxima de que toda publicidad es buena publicidad, y a pesar de su mala reputación entre la coalición por exponer a jerarcas del Poder Ejecutivo que “mintieron en el Parlamento” en el caso de la entrega del pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset, Ache está haciendo “una apuesta al futuro”, ya que identifica un PC “sin mujeres en roles demasiados relevantes” y “puede representar ese liderazgo femenino”, ya que la figura de Carmen Sanguinetti fue “de bajo perfil”.