El mandatario uruguayo, Luis Lacalle Pou, asumió ayer jueves al frente del bloque regional del que forma parte junto con Argentina, Brasil y Paraguay. Durante la cumbre, reafirmó su intención de avanzar en los acuerdos cerrados el año pasado con la Unión Europea y la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA). Por otro lado, también enfatizó en la necesidad de negociar nuevos acuerdos, en particular con Corea del Sur.
En la cumbre del Mercosur de ayer jueves, el mandatario uruguayo Luis Lacalle Pou puso el foco en la necesidad de sincerar las relaciones del bloque, apelando al consenso pragmático. Hizo énfasis, además, de la importancia de avanzar en aquellas acciones que los gobiernos estén dispuestos a concretar.
El jerarca, acompañado por las ministras de Economía, Azucena Arbeleche, y Relaciones Exteriores (interina), Carolina Ache, subrayó que el Mercosur no detuvo su agenda a pesar de la pandemia del Covid-19. A esto se le suma, además, que el bloque está por cumplir su trigésimo aniversario. En este contexto, Lacalle Pou reafirmó el compromiso de Uruguay con el acuerdo con la Unión Europea (UE) cerrado el año pasado.
“Los integrantes del bloque debemos de ser ‘mercorrealistas’, sincerar las relaciones entre nuestros Estados primero puertas adentro”, expresó. Para el mandatario, hay un triple deber: trabajar en la zona de libre comercio, consolidar el trato nacional de los productos y perfeccionar la unión aduanera.
Por otro lado, también se refirió a un posible incremento del proteccionismo, producto de la pandemia. Dentro de esta creciente amenaza, Lacalle Pou urgió a los países socios a terminar lo que se ha empezado.
“No debe haber peor señal global que no terminar los procesos que llevan tantos años de negociación, y estamos en la recta final. Por eso, de ser posible, en estos meses tenemos que firmar con la UE y con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA, por sus siglas en inglés)”, subrayó el jerarca. Asimismo, aseguró que durante su presidencia al frente del bloque se comprometerá a trabajar con Alemania -quien asume como presidente del viejo continente- para acelerar la firma y ratificación del documento.
También comentó que debe haber una intención de avanzar en otros acuerdos, en particular con Corea del Sur.
En otra parte de su disertación, a modo de reflexión, indicó que es mejor no avanzar si no hay disposición de las partes a terminar un proceso. “Somos gobernantes circunstanciales que podemos tener distintas sensibilidades e ideologías distintas; no podemos estar cada cuatro o cinco años variando el sentir y el derrotero de nuestros pueblos por una cuestión ideológica distinta”, acotó.
Por último, el flamante presidente del Mercosur reafirmó que el bloque toma decisiones por consenso, pero ello no puede significar lentitud. Por eso, debe ser pragmático con la capacidad de análisis, prevención, cómo reaccionar y avanzar en los tiempos mundiales.
“No podemos quedarnos en la vera del camino en un mundo tal veloz y vertiginoso. Uruguay apuesta al Mercosur real no al del papel, al bloque que realmente interactúe y que los uruguayos vean que en la región y dentro de nuestros países el comercio se incremente”, finalizó.