“No hay ningún sentido en dialogar sobre la seguridad social o los artículos de la LUC”

Para el senador nacionalista Sebastián da Silva ambos temas ya están laudados

El senador del Partido Nacional evaluó positivamente la actuación parlamentaria de su partido por haber aprobado la LUC, la reforma de la seguridad social y la reforma educativa; pero resta desarrollar muchas otras iniciativas desde el rol de oposición. Si bien espera diálogo, entiende que “presentar temas de urgencia está dentro de las lógicas de gobernar”, tal como lo hizo el gobierno saliente con la LUC.

Tras haber sido la lista más votada del Partido Nacional, el Espacio 40 consiguió cuatro senadores mediante una votación histórica. Así, el senador Sebastián da Silva alcanzó la titularidad de una banca en el Senado tras ocupar la de Javier García en calidad de suplente desde el año 2020.

Caracterizado por su discurso confrontativo en medios y redes sociales, celebró en aquel entonces vía X el hecho de que “después de 16 años el tractor amarillo sea la agrupación más grande del país”, según consignó en la publicación.

En conversación con CRÓNICAS, compartió su evaluación personal sobre el trabajo parlamentario en el rol de oficialismo que desarrolló la coalición y al mismo tiempo adelantó cuáles serán sus prioridades en este nuevo período.

En cuanto al primer punto, dijo que la aprobación de la LUC fue un logro, ya que ha funcionado como “la columna vertebral del gobierno”. Entre otros puntos, dijo que “da muchas libertades”, como la portabilidad numérica, y al mismo tiempo “ordena mucho”, en relación a prohibir los cortes de calle y las ocupaciones durante una manifestación. A su vez, al margen de la LUC también indicó como hitos la reforma de la seguridad social y la reforma educativa.

Como contrapartida, entre los asuntos que “quedaron en el tintero” se encuentra “la desmonopolización de los combustibles” -que calificó como “un debe grande”- y el proyecto vinculado a la personería jurídica de los sindicatos, “que quedó rengo y yo lo voté solo, junto a Cabildo Abierto”, dijo en referencia al proyecto de ley que se aprobó en abril de 2023 y que creó un nuevo Registro de Organizaciones de Trabajadores y Empleadores en la órbita del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), con un trámite abreviado para el reconocimiento de personería jurídica de sindicatos y cámaras empresariales. Sin embargo, se le dio el visto bueno sin los añadidos que planteó en ese momento la fuerza política fundada por Guido Manini Ríos; el voto secreto en los sindicatos y eliminar el descuento automático de la cuota sindical.

El vínculo con la oposición

Respecto al vínculo que desde el oficialismo se tuvo con la coalición, el legislador dijo que su fuerza política “dialogó con la oposición como la oposición nunca dialogó en la era frenteamplista de 15 años”.

Como “pruebas” citó el diálogo para lograr la reforma de la seguridad social y dijo que “sobre la LUC se dialogó todo lo ‘dialogable’”. Además, recordó la experiencia de diálogo que dejó atrás la mesa interpartidaria por seguridad que impulsó el asesor y coordinador de Estrategias de Seguridad Integral y Preventiva del Ministerio del Interior, Diego Sanjurjo. Este último “quedó medio trunco porque el Frente Amplio se levantó y se retiró de las negociaciones”, acotó.

“Yo no me voy a vulnerar porque el gobierno presente un tema de urgencia, porque está dentro de lo razonable y dentro de las lógicas de gobernar”, enfatizó.

Para Da Silva, sin embargo, “el diálogo tiene que tener un sentido”: “No hay ningún sentido en dialogar sobre la seguridad social sobre los artículos de la LUC”, expresó, ya que en el primer caso “la reforma se puso arriba de la mesa y el pueblo la avaló con su voto” y en el segundo hubo un referéndum. En palabras del parlamentario, hay que dialogar “de temas nuevos, como el plan de riego, no de temas que Uruguay ya resolvió”.


Prioridades blancas

El senador listó algunas de las prioridades para este nuevo período. Entre ellas, se encuentra realizar un “blindaje” de “la Ley de Defensa de la Competencia, porque se avecina una batalla judicial por parte de una fusión de grupos económicos de la industria frigorífica”, en relación a los movimientos económicos y legales que prevé la empresa Minerva tras reiterados intentos por adquirir tres frigoríficos de Marfrig.

Por otro lado, también se encuentra dentro de la lista de prioridades trabajar en “la responsabilidad gremial o patronal a la hora de afectar a terceros en un conflicto”, tal como -según el senador- ocurrió “el año pasado en la industria frigorífica, cuando se perjudicó a productores que no tenían nada que ver con las partes en disputa, y alguien se debería hacer cargo de las pérdidas”.

Finalmente, mencionó “viejos proyectos a desarchivar” respecto “al control de los perros furibundos en el campo, dándole la potestad a la Policía de eliminarlos”; a “modificar el pago del cuatrimestre del BPS en el área rural y encontrar una forma para que no sea a fines de enero para no postergar el pago por cuestiones climáticas y porque los productores vienen de pagar los aguinaldos”, entre otros.