En 2019 las energías de la clase política van a estar puestas en la campaña electoral, por lo cual si no se tratan algunos temas este año, quedarán pendientes para ser estudiados en el próximo gobierno. Por esta razón, los partidos opositores presionan para cerrar alianzas con otros países cuanto antes, dentro de las que se destaca el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Chile.
Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo
Dentro del oficialismo la apertura al mundo produce grandes matices. Tan es así, que desde que comenzó este período la Cancillería, con Rodolfo Nin Novoa a la cabeza, ha tenido una posición aperturista, pero en la interna del Frente Amplio (FA) la mayoría se ha manifestado en desacuerdo con esa postura. Parte de la oposición cree que esto es una paradoja, mientras que el partido de gobierno defiende la diversidad de las ideas.
“Uruguay este año debe definir cuál es su camino en materia de inserción internacional. Si terminamos el 2018 sin siquiera resolver el Tratado que firmó el gobierno con Chile, el año que viene despidámonos, y el otro entonces también, o sea que vamos a estar fuera del circuito mundial durante los próximos tres años”, advirtió en diálogo con CRÓNICAS el diputado nacionalista y presidente de la Cámara de Diputados, Jorge Gandini.
La semana pasada se reunió con la delegación parlamentaria inglesa, que tiene interés en avanzar en nuevos convenios ya que el 30 de marzo de 2019 Gran Bretaña se va a separar de la Unión Europea definitivamente, y comenzará a hacer acuerdos bilaterales. Pero Gandini cree difícil que se concrete: “Si no podemos resolver el de Chile, que está firmado, el otro olvidémoslo”, lamentó.
Pablo Mieres, senador y presidente del Partido Independiente, considera que la política exterior es una verdadera paradoja dentro del oficialismo, que comenzó en el año 2015, cuando el canciller Nin Novoa fue interpelado por la salida de Uruguay de las negociaciones por el TISA (Acuerdo sobre el Comercio de Servicios), pese a que concordaba con la oposición, que lo había convocado a esa instancia –quienes se oponían al pacto eran los propios legisladores frenteamplistas-.
Mieres presidió la Comisión de Asuntos Internacionales del Senado el año pasado, y en dos ocasiones lo llamaron del Ministerio de Relaciones Exteriores para empujar la votación del TLC con Chile, pero él les explicó que a quien tenían que convencer era a la bancada del FA, no a la oposición, recordó al ser consultado por CRÓNICAS. Hoy esa situación se mantiene, por lo que el parlamentario no tiene grandes expectativas de que cambie la política internacional, aunque está convencido de que es fundamental para el país.
Los colorados comparten que hay que modificar la política de inserción de Uruguay en el mundo con mayor apertura para asegurar algunos mercados y generar nuevos. Así lo manifestó a CRÓNICAS el diputado que integra la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara Baja, Tabaré Viera, quien criticó que el FA dejó pasar algunas oportunidades, pero instó a definir los pactos que están más avanzados, que son el de Chile y el de China.
Sin apuro
La Comisión de Asuntos y Relaciones Internacionales del FA elaboró un documento que está a estudio de la Mesa Política de la coalición. Como existen posturas contrapuestas, el tema va a ser abordado en un Plenario Nacional que se estima será realizado a fines de mayo, donde el partido de gobierno deberá asumir una decisión, no solo sobre la alianza con el país andino, informó a CRÓNICAS el vicepresidente de la Comisión de Asuntos Internacionales de Diputados, Roberto Chiazzaro.
Para muchos frenteamplistas ese tratado perjudicaría los intereses de Uruguay, y por eso son cautelosos y esperan por la definición del Plenario. Sobre la presión de la oposición por cerrarlo, el legislador oficialista sostuvo que “hay una gran ansiedad por quienes entienden que la apertura comercial es el camino de salida, pero no compartimos esa urgencia”.