En el marco de la política de apertura comercial que ejecuta la actual administración, el gobierno analiza la posibilidad de formar parte del TPP, un tratado de libre comercio que nuclea a 11 países de la cuenca del Pacífico. En este escenario, el consultor internacional Carlos Mazal destacó la importancia de esta alianza para el Uruguay. “Ojalá el presidente esté de acuerdo”, afirmó en diálogo con CRÓNICAS, y reconoció la premura de avanzar en esta materia.
El Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica- conocido como TPP por sus siglas en inglés- es un tratado de libre comercio que nuclea a 11 países de la Cuenca del Pacífico y que fue firmado el 4 de febrero de 2016 en Auckland, Nueva Zelanda. Su cometido, entonces, radica en rebajar las barreras comerciales, promover la integración económica, establecer un marco común de propiedad intelectual y reforzar los estándares de derecho del trabajo. Actualmente, y tras la retirada de Estados Unidos de este ecosistema, está conformado por Australia, Brunéi, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam.
Muestra de intenciones
El gobierno uruguayo comenzó hace meses las gestiones formales para evaluar las posibilidades de ingreso al Acuerdo Transpacífico, una iniciativa que surgió desde el Partido Colorado.
“Ante el panorama que presenta Uruguay en esta materia, y como ha manifestado en reiteradas oportunidades el señor presidente, nuestro país necesita, de modo impostergable, avanzar en su apertura al mundo y mejorar su inserción internacional. Ello requiere disponer de un abanico de países con quienes negociar con reglas claras y conocidas”, se afirmó hace semanas en un comunicado expedido por la Academia Nacional de Economía (Acadeco), sin embargo todavía no se han notificado avances en el tema.
Al ser consultado por CRÓNICAS sobre la importancia de esto en la política comercial del país, Mazal señaló que le parece fundamental. “Yo creo que ahí cabe perfectamente todo lo que Uruguay puede exportar y los socios también podemos convivir con todos perfectamente”, aseguró.
En esta línea, el también integrante de la Acadeco, manifestó la importancia del pronunciamiento de esta institución y destacó la investigación que esta realizó al respecto.
“Yo sería partidario de mandar la carta de adhesión ya, nada de seguir haciendo consultas”, enfatizó en la ocasión.
Si bien existen otros acuerdos en la órbita internacional de Uruguay, para el consultor este tiene prioridad. “Antes de que entre China -si es que entra- Taiwán, o Reino Unido, creo que Uruguay tendría que avanzar en esto ya. Todos los socios son buenos, pero yo creo que el Transpacífico tiene muchas ventajas”, recalcó.
Para el entrevistado, además de ser beneficioso para el comercio uruguayo, el rol del país podría ser muy útil en este ámbito; la historia diplomática, la trayectoria democrática y las sobrias ambiciones mundiales y regionales que tiene la nación, podrían hacer al país un moderador fundamental.
Según han explicado a los medios fuentes relacionadas con la diplomacia, en un principio el procedimiento para solicitar el ingreso supone mantener conversaciones con el país que preside el acuerdo y con cada uno de los socios por separado. En este proceso, todas las partes deben concordar para pasar al siguiente caso, o, por lo menos, no oponerse por escrito.
“Lo que escuchamos es que de los 11 que fueron consultados informalmente, nueve han dado luz verde y dos luces amarillas”, adelantó Mazal en este sentido.
Otro de los puntos que el gobierno uruguayo veía con cautela era el capítulo 17 del acuerdo, que establece que las partes se comprometen a no perjudicar a empresas de países socios, desplazándose de los mercados internacionales mediante el uso de subsidios. A su vez, este también incluye disposiciones específicas en relación a los monopolios estatales. No obstante, según explicó el consultor y en base al análisis de la Acadeco, finalmente las empresas estatales no serían un obstáculo para que Uruguay sea miembro contratante del TPP.
“Creo que hay que empujar este acuerdo, porque me parece que es viable, somos el país que calza, no por capricho ninguno, se analizó muy bien y ojalá el presidente esté de acuerdo”, indicó.
Además de Uruguay, países como China, Ecuador o Corea del Sur han manifestado su interés de unirse al TPP en el último tiempo.
Otros horizontes
Según informaron diversos medios internacionales, se pretende anunciar en la Cumbre de Jefes de Estado la culminación de un acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y Singapur. Las tratativas del Mercosur con este país, el primer miembro de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático con el que negocia el bloque, se iniciaron en 2019.
Ante este contexto, el consultor en asuntos internacionales y Magíster en Negocios Internacionales, Gonzalo Oleggini, se refirió a las incidencias que tendría este acuerdo para Uruguay.
“Creo que más allá de lo comercial, lo más importante es poder negociar, estar al frente y compartir experiencias con el segundo puerto con mayor movimiento del mundo después de Shanghái”, declaró el entrevistado. Actualmente, el puerto de esta nación recibe anualmente un estimado de 130.000 buques.
“Cualquier acuerdo es bienvenido, pero creo que tenemos que seguir planteando que Uruguay necesita acuerdos con potencias centrales- terminar el acuerdo con la Unión Europea, y poder ingresar en el TPP- que le permitan llegar a mercados como Europa, China, Corea o Japón”, sentenció en referencia a la política comercial del país.
