Según un análisis de la consultora Deloitte, la ley de urgente consideración propone modificaciones que apuntan a la promoción de pequeñas y medianas empresas. Según explicó a CRÓNICAS la gerente senior de la firma, Ana Méndez, se propone bajar el importe de las pymes a la DGI en función de su actividad, ingresos o dependientes, así como también disponer de una gradualidad en los pagos del importe.
La ley de urgente consideración (LUC), que se encuentra ahora en el Parlamento bajo revisión, compendia una gran cantidad de temáticas bajo su amparo.
Así, Deloitte realizó un webinar a sus clientes y público empresarial en general, repasando aspectos del proyecto relacionados con este ámbito que “pasan desapercibidos”. Así lo indicó a CRÓNICAS Ana Méndez, gerente senior de la firma, quien sostuvo que, desde Deloitte, pareció oportuno acercar estos temas a dicha audiencia para hacer hincapié en ellos.
Los cambios
Uno de los enfoques de la ley en los que se enfatizó fue la promoción de pequeñas y medianas empresas (pymes). De esta manera, se resaltaron los cambios que propone la LUC con respecto a la legislación actual.
En primer lugar, se subrayó lo relativo a la recaudación de la Dirección General Impositiva (DGI). Las dos modificaciones propuestas hacen referencia al Literal E del artículo 52 del Título 4. Así, se faculta al Poder Ejecutivo a bajar el importe a la DGI a empresas de acuerdo con su actividad, ingresos, dependientes, entre otros factores; actualmente ese monto se sitúa en $3.980.
Por otro lado, se dispone de una gradualidad en los pagos para este literal. Desde 2009 esto se realiza por ejercicio económico; de aprobarse la ley, los contribuyentes que inicien su negocio a partir de 2021 pagarán un 25% del importe en los primeros 12 meses, un 50% en su segundo año, y luego el 100%.
En segundo lugar, la LUC también prevé modificaciones en la gradualidad en los pagos para el Banco de Previsión Social.
De manera similar al aporte a la DGI, aquellos emprendedores que comiencen en 2021 pagarán aportes jubilatorios patronales por meses. Es decir, un 25% del monto total del mes uno al 12; un 50% del 13 al 24; un 75% del 25 al 36; y luego el 100% del importe.
Estos cambios regirán para los nuevos emprendimientos que den inicio el año próximo. Sin embargo, muchos emprendedores “podrían estar planteándose” una nueva inversión o abrir otro negocio, por lo que “tener en cuenta estas reducciones en las cargas es importante”, expresó Méndez.
Impresiones
La gerente senior de Deloitte señaló que, una vez entren en vigor las modificaciones -si es que se aprueba la ley-, hay que ver cuántos nuevos emprendimientos puede tener nuestro país en el corto plazo. Añadió, además, que con la coyuntura actual “da la impresión de que no va a ser algo muy significativo”.
En tanto, respecto a la adecuación de los meses para el pago del importe, la experta sostuvo que, en su opinión, es una medida que era necesaria y muy atendible. En este sentido, Méndez dijo que hay que esperar la reglamentación de la facultad del Poder Ejecutivo para reducir dicho aporte, “a ver cómo se traduce en la práctica”.
Asimismo, la experta opinó que las modificaciones planteadas harán que más nuevos emprendimientos sean viables, en tanto se apunta a reducir la informalidad mediante una reducción de costos.
“Creo que un poco esa es la preocupación que se traduce en la LUC: generar un espacio para que esos costos se vean reducidos, y en un emprendimiento que inicia, por lo menos que los costos se vuelvan lo más acotado posible para proporcionar opciones de viabilidad, y eso me parece super atendible”, finalizó Méndez.
