Carmen Sanguinetti: “Lo que quisimos fue generar un marco regulatorio sin encorsetar a los empleadores”

Desafíos del teletrabajo

La expansión del teletrabajo en el Uruguay a raíz de la pandemia y las regulaciones al respecto han causado tensiones entre los diferentes actores del sistema empresarial. En este contexto, CRÓNICAS participó del evento “Mirada 360 del teletrabajo”, organizado por DHC, que tuvo a la legisladora Carmen Sanguinetti como oradora. Además, mantuvo contacto con fuentes de KPMG para conocer las diferentes aristas de esta modalidad en el país.

La exhortación a la implementación del teletrabajo por parte del ejecutivo en marzo de 2020 generó incertidumbre en el campo empresarial del país. A pesar de que esta modalidad ya existía en Uruguay y que tuvo trato legislativo por primera vez en 2009, trabajar a distancia era algo desconocido para la mayoría de los uruguayos. Hasta ese momento los sectores más familiarizados con el tema eran las empresas tecnológicas. 

No obstante, la situación mundial impulsó esta forma de trabajo, lo que generó a futuro cambios en el mercado laboral. Según declaró a CRÓNICAS Juan Mora, gerente senior en el departamento de asesoramiento tributario y legal de la consultora KPMG, este fenómeno se dio de forma similar en toda Latinoamérica, generalizándose los rubros en lo que se aplica. En la actualidad, en base a los datos que maneja la firma, la modalidad que predomina es la híbrida, la que consiste en la combinación, durante la semana, de jornadas presenciales y virtuales.

Esta expansión generó la necesidad de creación de un marco regulatorio. La legislación al respecto ha generado diferentes intercambios entre los actores del ecosistema empresarial. Por ejemplo, para el sindicato de técnicos prevencionistas (Suprevu), esta regulación carece de especificaciones técnicas.

Sin embargo, para otros actores, como la senadora del Partido Colorado, Carmen Sanguinetti, la ley va en el camino correcto.

Disertaciones al respecto

En esta línea, en el evento de la Organización Internacional de Directivos de Capital Humano (DCH), diferentes personalidades relacionadas con la materia abordaron la temática.

Entre estos, resaltaron la senadora Sanguinetti y la abogada de Guyer & Regules, María José Poey. 

En la ocasión, la legisladora se refirió al tratamiento del teletrabajo en el Parlamento, y aseguró que, aunque sabe que es perfectible, la regulación va en el camino correcto.

“Lo que quisimos fue generar un marco regulatorio sin encorsetar a los empleadores”, manifestó.

Además, agregó que Uruguay tiene desafíos en el ámbito laboral que trascienden el teletrabajo.

En lo que refiere a la modalidad, Sanguinetti fundamentó que cree que es esencial sobre todo para la primera etapa de la maternidad, así como para personas con discapacidad o que viven lejos de sus centros de trabajo.

Por otra parte, Poey profundizó en los desafíos normativos de la regulación. A diferencia de la representante del Partido Colorado, esta señaló que la ley puede interpretarse en una posición menos favorable para los empleadores.

Asimismo, Virgina Maruri, gerente de Gestión Humana y SySo de Saman, y Enrique Herrera, gerente de Gestión Humana de Tata S.A, se refirieron a la realidad de esta modalidad en términos de recursos humanos.

En concreto, para Herrera, uno de los temas a atender es el mantenimiento del sentido de pertenencia y la sinergia entre los trabajadores del equipo.


La complejidad de la regulación en las zonas francas

Según manifestó Mora, de KPMG, uno de los sectores que experimenta mayor dificultad en la materia es el relacionado con las empresas de las zonas francas. 

“En principio estas no quedarían alcanzadas por la normativa general, ya que la ley de zona franca obliga a realizar la actividad dentro de la propia zona”, detalló.

En este sentido, también agregó que si bien hay una ley que permitiría el trabajo a distancia  para estas, está faltando la reglamentación.