Luego de la decisión de Nelsury de no continuar con la licitación por un área de 8.900 m2 en el Puerto de Montevideo, a pesar de haber obtenido su adjudicación, la ANP definió que sea la Comisión de Adjudicaciones la encargada de darle una definición al tema.
La Licitación Pública III/17, con fecha del 20 de setiembre de 2017, que establece el otorgamiento del permiso para brindar servicio a contenedores y a la mercadería asociada a estos en un área aproximada de 8.900 m2 en régimen de Puerto Libre en el Puerto de Montevideo, tuvo, por estos días, un nuevo capítulo.
A la misma se presentaron Orbiplus SA, Montecon SA, Dervalix SA y Nelsury SA, resultando ganadora esta última. En orden le siguieron Orbiplus y luego Montecon, quedando la oferta de Dervalix sin efecto por no cumplir con requisitos formales de la licitación.
Recientemente culminó todo el proceso interno de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Tribunal de Cuentas y Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), confirmando a Nelsury SA como adjudicatario del área. En este mismo proceso, el Tribunal de Cuentas observó la oferta de Orbiplus, señalando que la misma no tendría que haberse considerado admisible en razón que dicho oferente carece de capacidad para contratar con el Estado, al no estar inscrita en el Registro Único de Proveedores del Estado (RUPE), incumpliéndose lo dispuesto por los artículos 46 y 76 del Tocaf.
El pasado 28 de agosto venció el plazo para que Nelsury entregase todas las garantías y requisitos comprendidos en el pliego. Sorpresivamente, ese mismo día, Nelsury presentó una nota formal a la ANP bajándose de la licitación.
A partir de ahí, y según el artículo 37º de la sección IV del Pliego de Licitación, si el oferente que resulte adjudicatario no depositara la garantía de fiel cumplimiento de contrato dentro del término establecido, perderá la garantía de mantenimiento de oferta, quedando la ANP en libertad de aceptar otra propuesta o disponer la realización de un nuevo llamado a licitación.
En diálogo con CRÓNICAS, Alberto Díaz, presidente de la ANP, confirmó que la licitación le fue adjudicada a la firma Nelsury, y cuando se la invitó a firmar el contrato, debiendo la misma presentar una garantía de mantenimiento del contrato, en lugar de hacerlo, presentó una nota diciendo que no iba a continuar con la licitación, y comunicó la decisión a las autoridades de la ANP. “Eso fue tratado en el Directorio de la ANP (la reunión fue el pasado miércoles 5), y estaba previsto en el propio pliego de que cuando alguien no mantiene la garantía de mantenimiento de oferta, se le ejecuta esa garantía. Hasta ahí es donde llegamos”, expresó Díaz.
Al ser consultado sobre las opciones que se barajan ahora, el titular de la ANP estableció que la primera alternativa es ver si esa licitación es factible de adjudicarle al segundo. “Eso es clave, pero no se resolvió sobre ese tema”, remarcó.
Según Díaz, ahora le corresponde a la Comisión de Adjudicaciones, que fue quien hizo la primera recomendación al Directorio, analizar el tema. “No me quiero adelantar a las conclusiones de la comisión. Si se podía salvar el llamado, se podría continuar con el mismo, pero no sabemos si se puede o no; eso depende de la decisión de la comisión. Para nosotros es un tema de ahorro de tiempo y de legalidad. Si la licitación sigue siendo válida, correspondería seguir con la misma si es que hay otros oferentes válidos”, aclaró.
El mismo miércoles 5, el tema pasó a manos de la comisión, que deberá echar luz sobre el tema.
Dado que la segunda mejor oferta está observada por incumplir con el Tocaf, una opción podría ser que la ANP pasara por alto las observaciones del Tribunal de Cuentas referidas a Orbiplus; otra alternativa sería adjudicar el predio a la tercera mejor oferta, que en este caso es la de Montecon; o en su defecto, realizar un nuevo llamado a licitación, pero ninguna de estas opciones fue comentada por Díaz.