La Conferencia Global del Día Mundial de la Libertad de Prensa 2022 se llevó a cabo en el Centro de Convenciones de Punta del Este del 2 al 5 de mayo. La charla de apertura titulada “El periodismo bajo el asedio digital” problematizó el avance tecnológico. A su vez, el cierre oficial se realizó en Colonia, donde el subsecretario de Turismo, Remo Monzeglio, afirmó que Uruguay es “un país de libertad, libertad de expresión, libertad de prensa, libertad en el sentido más amplio del término”.
El evento contó con la presencia de las autoridades máximas, Luis Lacalle Pou, presidente de la República; y Audrey Azoulay, directora general de la Unesco.
Durante la discusión planteada bajo la frase “El periodismo bajo el asedio digital” participaron Irene Khan, relatora de las Naciones Unidas; Shoshana Zuboff, profesora emérita de la Universidad de Harvard; Timnit Gebru, fundadora y directora ejecutiva de Distributed Artificial Intelligence Research Institute (DAIR); Claudia Duque, periodista de investigación; Will Cathcart, director ejecutivo de WhatsApp; y Marcelo Bechara, director de Relaciones Institucionales y de Regulación de Grupo Globo.
Respecto a la creciente sofisticación y la imposibilidad de detectar los malware y los spyware y su uso contra periodistas y defensores de derechos humanos por actores estatales y no estatales en el mundo, Irene Khan, relatora de las Naciones Unidas, reflexionó sobre el tema: “es muy peligroso lo que ocurre como el robo de datos en las plataformas digitales, porque todo sucede sin el conocimiento, sin la conciencia y sin un clic”.
Khan también destacó la perspectiva de género relacionada con la vigilancia dirigida a periodistas mujeres en la que el proceso de hostigamiento comienza en la recopilación de la información y de conversaciones, continúa el peligro con la acumulación de datos enlazados a la residencia de las féminas y sus rutinas, que luego se usan en campañas de difamación y provocan inseguridad, “es una forma de violencia de género hacia las mujeres, que puede llevar a homicidios, ataques, abuso e intimidación”.
Claudia Duque, periodista de investigación y corresponsal de radio Nizkor de Colombia, contó su historia de secuestro durante 2001, en la que sus captores le mencionaron tener conocimiento de su profesión y la amenazaban por la investigación que realizaba.
Duque también recapituló acerca de las torturas psicológicas con un modus operandi que se definía en la interceptación de correos electrónicos y llamadas, basadas en análisis que hacían los servicios secretos de Colombia, lo que culminó en el desistimiento de la periodista de continuar en dicho país.
“En 2001, bajo el esquema de protección del gobierno colombiano, considerado el mecanismo de protección más robusto y perfecto del mundo, descubrí cómo el auto blindado que se me había brindado para mi protección, tiene en su interior diferentes dispositivos de espionaje que hacen que sea un sistema móvil de espionaje, con posibilidad de seguimiento por varios GPS que se conectan a los dispositivos de transmisión de señal que tengas”, resumió.
Desde otra óptica, Will Cathcart resaltó que “la encriptación es muy importante. WhatsApp usa la encriptación de extremo a extremo, son mensajes seguros que solo el destinatario puede ver, es importante que esta información sea segura porque nadie quiere compartirla con una empresa privada”.
Sobre el tópico libertad de expresión, Timnit Gebru observó diversos puntos que se unen, como racismo y colonialismo relacionado a la explotación de trabajadores que utilizan a la inteligencia artificial como “materia prima”.
En tanto, Marcelo Bechara aclaró: “no es que el periodismo esté bajo sitio, es la propia democracia y toda la actividad humana que se ven impactadas en esta revolución digital desde los años 90, cuando el internet comercial explotó… Y ahora enfrentamos otra época con la amenaza de la democracia y el incremento de autoritarismo dirigido al periodismo como enemigo del pueblo. ¿Quién cree que los periodistas son los enemigos del pueblo?”.
“Un país de libertad”
El cierre oficial de la conferencia fue en Colonia del Sacramento y asistieron Carlos Moreira, intendente de Colonia, y Remo Monzeglio, viceministro de Turismo, así como las delegaciones convocadas al encuentro.
Durante el acto, Moreira ratificó “la importancia de recibir a tan distinguidos visitantes” y agradeció a las autoridades de Unesco por elegir Uruguay para el evento.
Monzeglio también agradeció a la organización y despidió a las delegaciones extranjeras en cuatro de los seis idiomas oficiales de la Unesco: inglés, francés, italiano y español.
“Han llegado ustedes a un país de libertad, libertad de expresión, libertad de prensa, libertad en el sentido más amplio del término”, pronunció.