El presidente estadounidense Donald Trump anunció el pasado martes que Estados Unidos pondrá fin al acuerdo nuclear pactado con Irán en 2015. Firmado para limitar el desarrollo nuclear iraní, junto con el cierre se anunció también la imposición de sanciones económicas por parte del país norteamericano.
Por Ignacio Palumbo | @ignacio_palumbo
En qué consiste
Firmado en 2015 bajo la administración del presidente Barack Obama, el acuerdo entre Estados Unidos e Irán fue uno de los mayores logros del entonces mandatario. El mismo tenía como objetivo que Irán no se volviera una potencia nuclear de aquí a diez años de firmado el pacto.
Para eso, se resolvió (entre otras medidas) paralizar el enriquecimiento de uranio a niveles por debajo de 3,67% – en comparación con el 90% necesitado para construir un arma nuclear -. Además, Irán aceptó estar dispuesto a que el Organismo Internacional de Energía Atómica (IAEA por sus siglas en inglés) realice chequeos para controlar que, efectivamente, no se trabajara en armas nucleares.
De esta manera, la IAEA realizó estos chequeos en los últimos dos años desde que se firmó el acuerdo, y publicó diez informes en los que anunciaba que Irán cumplía con su parte.
A cambio, al país del Medio Oriente se le levantaron sanciones en sus principales actividades económicas, permitiéndole a Irán desarrollarse como país dentro de la región.
Así, este acuerdo, que contaba con el apoyo de Rusia, China, Alemania, Francia y el Reino Unido, logró limitar el desarrollo nuclear de Irán frente a la preocupación de su problemática relación con Israel.
La razón detrás del cierre
De acuerdo al analista internacional Ignacio Bartesaghi, la decisión de Trump pudo haberse dado a causa de dos factores principales.
Por un lado, una de estas razones es la constante actitud de Trump en eliminar todo lo relacionado a la administración de su predecesor: “Trump se fue del acuerdo del cambio climático, se fue del TPP (Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica), tiene una política con Cuba y Venezuela distinta a la de Obama, tiene una política con los musulmanes en términos migratorios distinta a la de Obama, y ahora traslada nada más y nada menos que la Embajada de EE.UU. en Israel, de Tel Aviv a Jerusalén”.
Por el otro lado, Bartesaghi también explicó que el presidente estadounidense “no cree en Irán”; es decir, a pesar de los informes de la IAEA, “EE.UU. no cree en que Irán haya cortado el proceso para tener armas nucleares” sino que simplemente aceptó el acuerdo para “fortalecerse económicamente para después ganar potencia”.
Qué significa el fin
Para Bartesaghi, la decisión tomada por Trump “obviamente genera inestabilidades” dentro de “la región más sensible en términos de potenciales conflictos del mundo”.
Al eliminar este pacto, Estados Unidos le impone sanciones económicas a Irán, las cuales le impiden comerciar con otros países y, por tanto, impiden su desarrollo, lo que a su vez puede generar inestabilidad en la región. A esto se le suma también que le permite la elaboración de un arsenal nuclear sin los límites que tenía al estar enmarcado en este pacto, es decir, más inestabilidad aún
“Es muy difícil ver qué impactos puede tener; hoy es apresurado decirlo, porque va a depender de cómo reaccionan el presidente de Irán y los otros países de la región. Te diría que es impredecible”, afirmó Bartesaghi sobre los efectos certeros que tiene el cierre de este pacto.
Sin embargo, Bartesaghi hace un paralelismo entre la salida de Estados Unidos de este acuerdo y del acuerdo del cambio climático. Destaca que si bien la potencia norteamericana abandonó este pacto, es posible que los miembros que aún lo conforman mantengan diálogos con Irán para que no aumente su producción nuclear.
Alemania, Francia y el Reino Unido podrían intentar convencer a Irán para que, a pesar del bloqueo económico impuesto, el pacto no se termine por completo. “La dificultad es que con sanciones económicas tomadas por EE.UU. es bastante difícil mantener el acuerdo”, sostuvo Bartesaghi. Así, él subraya la importancia que tienen las decisiones de las potencias europeas frente a la resolución estadounidense, así como también la respuesta que Irán tiene para dar al respecto.