El presidente de la Agrupación de Profesionales Asesores en Seguros (Aproase), Lorenzo Paradell, recibió a CRÓNICAS para brindar una entrevista en el marco del Día del Corredor de Seguros. El directivo habló sobre los cambios que trajo la pandemia y sostuvo que en Uruguay se asegura “primero el auto y después el resto, entonces, tenemos que cambiar la mentalidad”.
-¿Cuáles son los principales desafíos que atraviesa el sector?
-Hemos superado con éxito la etapa de la pandemia, pudimos mantener a nuestros clientes y la actividad de seguros en situaciones casi normales, teletrabajando. Los desafíos a futuro son estar actualizados y cada vez más profesionalizados. Queremos jerarquizar la profesión y para eso estamos trabajando, para que el corredor de seguros sea cada vez más profesional y tenga más capacidad para asesorar a los clientes. Ese es uno de los grandes desafíos. El mundo hoy es muy dinámico y precisamos estar totalmente actualizados. Por otro lado, debemos desarrollar nuestras capacidades tecnológicas y estar al día para asesorar de mejor forma.
-En una entrevista con CRÓNICAS realizada el año pasado, su antecesor, Juan Pablo Risso, señaló que el mercado de seguros es fiel reflejo de cómo se encuentra la economía del país. ¿Usted cómo ve ese reflejo?
-Coincido totalmente. Cuando la economía responde y crece nosotros creamos consecuencias porque nuestros clientes son el resultado directo de la economía. Por suerte, el país en la pandemia no se paró totalmente, sino que se fue reactivando de a poco y eso nos permitió seguir trabajando. Si bien tuvimos un estancamiento como todo el país, después se fue mejorando y creciendo en consonancia con la economía
-¿Considera que el crecimiento se dio de igual manera que lo hacía previo a la pandemia?
-Creo que este ha sido un buen año, hubo bastante trabajo. A esta altura del año no tenemos los datos, pero hemos crecido.
-¿Cómo fue asumir la presidencia después de la pandemia?
-Es un nuevo desafío, es la tercera vez que soy presidente y hace más de 30 años estoy relacionado con la gremial. Lo asumí con las ganas de siempre, nuevos desafíos e ideas de renovación de directiva, porque estamos incorporando gente más joven. Estamos cumpliendo un ciclo dentro de la institución y creemos que hay que darles paso a las nuevas generaciones. Tenemos el mandato hasta diciembre del año que viene y es una actividad que me resulta muy atrapante. Sin dudas lo disfruto.
-¿Cuáles fueron los cambios de adaptarse a un asesoramiento virtual?
-Fue difícil al principio, no estamos acostumbrados, pero los clientes se adaptaron bien al nuevo funcionamiento. Antes era mucho cara a cara y estar en contacto. Hoy nos quedamos con esta nueva situación. Sin embargo, sostengo que la presencialidad es fundamental, verse y estar mano a mano es muy importante, y más en nuestro caso, que asesoramos sobre los bienes de los clientes, por lo cual parece un poco frío hacerlo a distancia.
-¿Cuál es el principal papel del corredor de seguros hoy, donde la tecnología juega un rol decisivo?
-Sin dudas, la mayoría de nosotros estamos con el celular prendido las 24 horas del día y damos respuesta en todos los casos. Cuando el cliente tiene un siniestro hay que asesorar con el tipo más adecuado y acompañar, porque necesita escuchar la voz, debemos indicar los pasos a seguir y transmitir tranquilidad. Hoy tenemos una ley de seguros que hay que respetar, con eso también tenemos que asesorar a nuestros clientes.
-¿Considera que el país está preparado para el asesoramiento virtual?
-Por un lado, sobre todo las nuevas generaciones están más acostumbradas y no tienen inconveniente en comunicarse por esa vía. Las personas mayores requieren un tipo de contacto más personal. El gran problema del país es que todavía hay poca cultura de seguros, la llegada es menor en comparación a otros países de Latinoamérica y nos cuesta. Uno lo ve como un gasto y no como una inversión. Nosotros aseguramos al revés que Europa, ahí lo primero es la vida, después la casa y luego el auto. Acá es primero el auto y después el resto, entonces, tenemos que cambiar la mentalidad.
-¿Cree que la pandemia hizo que los seguros cobraran importancia?
-Sí, hace poco tuvimos una reunión con una compañía que festeja aniversario y hablaron de todo lo que se había pagado por covid-19 en el mundo. Los seguros de vida tuvieron un rol importante. En el caso de otros riesgos, por ejemplo, bajaron los niveles de seguro de robo y accidentes porque la gente salía menos. Sin embargo, nos encontramos con incendios catastróficos a principio de año, tanto forestales como edificios. Todo eso ha removido, pero a la gente le cuesta contratar un seguro.
-¿Cuáles son los tipos más demandados?
-Primero, el seguro de auto, al de vida todavía le falta cultura. Hay muchos en ahorros por el tema de previsión. Los seguros de robo han bajado un poco, y después, los riesgos técnicos que corresponden a la actividad civil, que está tomando más fuerza que en otras épocas. Hoy se reclama mucho más por mala praxis o accidente laboral. El seguro de fianza y el de alquileres han tomado mucho vigor también. Antes era un depósito, pero hoy es relativamente fácil acceder al seguro de alquiler.
-¿Qué proyectos o expectativas tiene para el resto de periodo?
-La agrupación va a seguir con las capacitaciones y estamos integrando una federación que empezamos a crear hace dos años e integramos con Aproase, Cuaprose y el Círculo de Agentes de Seguro. Estará por encima de las otras gremiales y tenemos muchas esperanzas de jerarquizar la profesión, queremos darle impulso y reconocimiento porque muchas veces se nos ve como comisionistas y no asesores.
A la par de las nuevas demandas del mercado
-¿Cuáles son las características principales del asesor?
-Por un lado, actualizar los conocimientos, porque por más que uno tenga muchos años en la profesión, el trabajo del corredor de seguros es muy vasto. Tiene que conocer las pólizas de todos los riesgos de las diferentes compañías. Apuntamos a eso y más cuando los riesgos van cambiando. Algunos nuevos son los vinculados a la tecnología y el hackeo. Todo eso hizo que creáramos la comisión de capacitación donde realizamos un diagrama de planificación de los cursos para estar al día de las nuevas demandas del mercado.
