Daniel Diverio, presidente del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca), se refirió al desempeño del sector en la coyuntura que atraviesa. En diálogo con CRÓNICAS, afirmó que se está en una meseta desde 2016, aunque sostuvo que durante la pandemia “el nivel de aportantes superó los 41.000 trabajadores”, por lo que, en realidad, se mantuvo estable. A futuro, auguró un 2021 de leve crecimiento para el sector: “Es alentador que la construcción pueda ser uno de los motores que dinamice la economía”, aseguró.
La industria de la construcción, a nivel nacional y también regional, se encuentra en la actualidad un escenario de meseta. Del 2016 a esta parte, su nivel de actividad se mantiene en alrededor de 45.000 trabajadores.
Así lo aseveró el presidente del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca), Daniel Diverio, en diálogo con CRÓNICAS.
“Eso demuestra que es uno de los sectores de la actividad que dinamiza más la economía. Fue uno de los elementos centrales en la discusión de los Consejos de Salarios, y gracias al cual tuvimos la argumentación más fuerte para poder exigir una fórmula salarial que mantuviera el salario durante todo el período”, añadió el dirigente sindical.
Consultado acerca de si la crisis sanitaria del Covid-19 hizo recaer a ese escenario de meseta, Diverio afirmó: “En plena pandemia el nivel de aportantes superó los 41.000 trabajadores”. Es decir, que se mantuvo la actividad a pesar de la coyuntura negativa.
Esto se debe, argumentó, a la existencia de una “fuerte” inversión pública “que ya venía de años anteriores”, de obras “que se estaban desarrollando y había que terminar de hacer”. Esto incluye proyectos de participación pública y privada (PPP), la construcción de la segunda planta de UPM “y todo el desarrollo alrededor” (viviendas, el Ferrocarril Central y el puerto), “y también la fuerte inversión que veíamos en los últimos tiempos en algunas intendencias -fundamentalmente la de Montevideo- que tenía tres o cuatro obras centrales que generaban muchos puestos de trabajo”, enfatizó.
Así, a partir de este conjunto de proyectos, Diverio se mostró optimista de cara al futuro. “Estamos en un año en el que vamos a mantener el nivel de empleo”, auguró. Para el próximo, agregó, habrá un pequeño crecimiento.
“Para la situación que está viviendo el país, es alentador que la construcción pueda ser uno de los motores que dinamice la economía”, recalcó.
Conversatorio
Por otra parte, el presidente del Sunca se refirió al diálogo tanto con el sector empresarial como con el gobierno.
Sobre el primero, indicó que existe una “fuerte cultura de negociación”. Más del 95% de los conflictos que se generan en la industria -que es una de las que tiene más conflictividad- se resuelve en el propio centro de trabajo, detalló Diverio.
Según consignó, muy pocos casos son elevados a la órbita del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social(MTSS); “eso habla que hay una fuerte cultura de negociación de ambas partes, y creo que eso es muy bueno”, apreció, y agregó que con los empresarios se mantiene una relación “dinámica y periódica”.
En relación al trato entre el sindicato y las autoridades de la administración liderada por Luis Lacalle Pou, el sindicalista señaló que tanto las cámaras empresariales como los trabajadores organizados ayudaron a que el MTSS “pudiera resolver una situación muy compleja como tenía que ver con los convenios colectivos”.
