La presidenta de la Cámara Uruguaya de Gimnasios y Afines (CUGA), Lourdes Rapalin, dialogó con CRÓNICAS al respecto de las medidas tomadas en los últimos días por el gobierno para beneficiar a los sectores más golpeados por la pandemia, entre los que se encuentran los gimnasios. La presidenta de la organización estimó que las medidas «no aportan nada nuevo». Además, afirmó que las intendencias departamentales sancionan a los establecimientos en los que se esté trabajando aunque sus puertas no estén abiertas al público.
«Las medidas son todo lo que ya habíamos conseguido», aseguró la presidenta de CUGA, Lourdes Rapalin, a CRÓNICAS al respecto de los anuncios realizados esta semana por el gobierno.
La también diputada suplente por el Partido Nacional y propietaria de Bethel Spa indicó que las exoneraciones del cargo fijo de UTE y OSE «ya las habíamos tenido» y «no ayudan en nada”, aunque estimó que “algo es algo».
En la misma línea, la representante de CUGA señaló que para poder acceder a los préstamos propuestos por el Ejecutivo las empresas deben estar al día y aseguró que los certificados al día no están por que “la gente ya está endeudada”, por lo que “nadie accede a esos préstamos».
Asimismo, señaló que los subsidios no son claros y que solicitaron al Ministerio de Economía y Finanzas una aclaración.
«Nosotros entendemos (que se dé un subsidio) para unipersonales o monotributistas que no tienen seguro de paro, pero se entiende que es para todas las personas que están sin registro y en la informalidad. Eso genera que unipersonales o monotributistas que han aportado toda la vida como corresponde no tienen derecho a un subsidio y sí lo tienen los informales, es decir los que están en la irregularidad».
Según lo dicho en la conferencia de prensa, la medida anunciada por el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, establece un subsidio para trabajadores informales sin ingreso o con ingreso mínimo que se desempeñan, entre otros rubros, en deporte. Este será de $ 7.305 mensuales y por tres meses.
«¿Qué pasa con los que están al frente de las empresas?», se preguntó Rapalin y aseguró que “no se trata de inversionistas» o personas que atraviesen un gran pasar: «Son emprendedores que la pelean día a día y que no tienen ningún tipo de apoyo económico y tienen que pagar la luz, la OSE y los alquileres».
Rapalín señaló que, en los hechos, los alquileres son el costo más importante que tienen que enfrentar los gimnasios y también el más difícil de resolver.
Sancionados
«Los gobiernos departamentales no colaboran en nada, salen a inspeccionar y si hay un profesor que está dando clases por Zoom te notifican y te pueden llegar a multar o a clausurar», dijo Rapalín y aseguró que la autoridad municipal no permite hacer ni siquiera tareas administrativas dentro de los locales: «Te dicen, literalmente, que lo hagas en la calle». En este marco, la representante de CUGA sostuvo que el decreto de Presidencia «no dice que el negocio tenga que estar cerrado».
Según pudo corroborar CRÓNICAS en el portal de Presidencia, la medida presentada el pasado 23 de marzo dispone «el cierre de los clubes, gimnasios, y prácticas de deporte amateur hasta el 12 de abril».
La presidenta de CUGA aseguró que la Intendencia concurre a los establecimientos porque la gente, asustada, denuncia: «Han hecho ver como que el gimnasio es mala palabra, como que ir al gimnasio está mal cuando no es así», reafirmó.
Esenciales
En la primera semana de mayo, la Asociación de Gimnasios presentará por medio de la Cámara de Diputados un proyecto de ley para declarar que la actividad física sea esencial para la salud del ser humano.
«Si nosotros apostamos a la buena calidad de vida, tiene que haber políticas públicas que declaren esencial a la actividad física», remarcó Rapalin.
Consultada acerca de los contagios de covid-19 y los protocolos en los gimnasios y clubes deportivos, Rapalin sostuvo: «No hubo un solo contagio en los gimnasios desde que empezó la pandemia el 13 de marzo del 2020».
En esta línea, la representante de CUGA enfatizó que «no se conoce un solo foco dentro de un gimnasio» y estimó que «hay 223 casos que fueron focos en clubes sociales y deportivos como la Selección Uruguaya de Fútbol, Nacional o clubes de basquetból», apuntó y agregó: «No tienen nada que ver con nuestra actividad y es el sector que puede continuar con normalidad».
Cabe aclarar que en diciembre de 2020 el Subsecretario Nacional del Deporte, Pablo Ferrari, aseguró al programa Así Nos va de radio Carve que 100 de los 1.560 casos activos en aquel entonces correspondían a clubes y gimnasios cerrados. En tanto, en marzo, el Ministerio de Salud Pública (MSP) difundió que detrás de los contagios intrafamiliares que representaban siete de cada diez casos, los que más habían crecido eran los casos relacionados a la enseñanza seguidos por los clubes y gimnasios.
Rapalin reconoció que el argumento para cerrar los gimnasios fue una «disposición científica», pero agregó: «Cuando se habla de gimnasios se olvidan de que el sector está profesionalizado hace 15 años. No son los grandes clubes sociales y deportivos, a un gimnasio nadie va a sociabilizar, no tiene nada que ver», concluyó la empresaria y resaltó que los gimnasios son los que «ayudan a las personas a sanar».
En esta línea, aseguró que la actividad física es clave para controlar la ansiedad, atacar la depresión y ayuda a tratar enfermedades como la diabetes o cardiopatías.
«Los que van a hacer actividad física a la rambla, por ejemplo, representan solo un 6% o menos de la población, somos los fanáticos, los demás precisan a alguien que les esté marcando lo que necesitan y motivándolos», puntualizó y remarcó que el cierre de los gimnasios potencia la informalidad en el sector.