El Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop) cumple 15 años y el director del instituto, Guillermo Dutra, entrevistado por CRÓNICAS, realizó un repaso de los principales hitos y planteó las nuevas metas marcadas para el próximo año. “El Inefop goza de una saludable institucionalidad”, subrayó.
Por Antonella Aguinaga | @antoaguinaga15
Desde sus comienzos, la misión institucional del Inefop estuvo basada en los trabajadores en seguro de desempleo, para luego ampliar el trabajo que se hacía en la Junta Nacional de Empleo hacia todos los trabajadores.
Según explicó Dutra, a partir del 2020 y con el actual gobierno, el Inefop comenzó un proceso dinámico y con muchos desafíos. “El instituto supo revertir los problemas”, sostuvo en referencia a la pandemia.
En la actualidad, el Inefop beneficia a más de 50.000 trabajadores en varias áreas y con una inversión de US$ 30 millones al año. En ese sentido, sectores de actividad particulares como las nuevas tecnologías, demandaron especial atención para aplicarlas a grupos vulnerables.
Principales logros
El director destacó la reestructura del instituto comenzada este año, que estuvo acompañada por un importante proceso de digitalización. “El 70% de la propuesta formativa es en formato semipresencial u online”, dijo, y agregó que el énfasis estuvo puesto en los jóvenes a través de puestos de trabajo en conjunto con empresas. Además, se agregaron nuevas gerencias de TIC con el objetivo de “estar más cerca del usuario”. En ese sentido, el director sostuvo que el Inefop reactivó el programa Pro Joven que tiene un 40% de inserción laboral.
Por otra parte, el instituto realizó alianzas con el sector público, dentro de las cuales Dutra remarcó el programa con el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) financiado por el Banco Mundial a propósito de la alfabetización a mujeres rurales de centros poblados con menos de 5.000 habitantes.
En cuanto a instituciones privadas, el Inefop trabaja a través de llamados, sobre los que resaltó la ventanilla RIDE que realizó cuatro llamados abiertos con una inversión de más de $ 100 millones, y proyectos como Sofka en Paysandú abordaron la formación de jóvenes en habilidades digitales en localidades como Quebracho, Guichón y Pueblo Grecco en Río Negro.
Otros programas y proyecciones hacia 2024
Otro de los programas más destacados del año fue el de Bachilleres impulsado con el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) y ANEP, focalizado a más de 3.500 jóvenes del interior del país a través del cual reciben una beca económica sujeta a la culminación del año lectivo.
El entrevistado explicó que con el MEC y el Sodre, el Inefop también promovió la profesionalización de sonidistas e iluminadores y se habilitaron opciones de formación que faciliten el egreso de los bailarines del Ballet Nacional del Sodre.
En tanto, con la Dirección de Educación se coordinó apoyar a los Cecap para que, a través de “Orientar Orientales”, se les facilite la orientación vocacional a 700 jóvenes que pertenecen a los 27 centros que existen en el país.
Además, destacó las innovaciones en materia de eficiencia energética y energías renovables trabajadas en conjunto con UTU, UTEC y la Dirección de Energía.
Programas como Accesos del Ministerio de Desarrollo Social (Mides) permitieron la formación de 1.800 cuidadores y la capacitación de 2.000 personas.
Uno de los principales objetivos planteados por Dutra fue apostar al desarrollo de mejores dispositivos de evaluación a través de nuevos convenios. Sin embargo, indicó que “existen aspectos como la calidad del empleo, continuidad educativa, mejora de la empleabilidad y proyección ocupacional que deben ser mejor abordados”.
Programa “Yo estudio y trabajo”
Según explicó Dutra, este año se realizó una nueva edición del programa “Yo estudio y trabajo” para jóvenes que se encuentran cursando el nivel de enseñanza media y que acceden a puestos de trabajo del sector público. El programa fue construido en conjunto con las consultoras Manpower, KPMG y PwC.
“Apoyamos la orientación de los jóvenes para luego derivarlos”, dijo el jerarca, e hizo énfasis en el programa complementario “Templar”, dedicado al desarrollo de competencias blandas que benefició a unas 16.000 personas.