El Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria se orienta a la internacionalización para posicionar a Uruguay

SOJAS DE INIA > Lograron un buen rendimiento llegando a 4.500 kilos por hectárea

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El Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) lanzó su estrategia de internacionalización apoyado en la búsqueda de oportunidades de capacitación y conocimiento, así como también de financiamiento para incrementar el capital físico e institucional.

En este marco, el director del organismo, Fabio Montossi, expresó la necesidad de una investigación “robusta e innovadora”, para la incersión mundial de un país que desea dar un salto cualtitativo al mercado de alto valor. “La ciencia y la tecnología en la era del conocimiento está en todas partes del mundo. Hoy, el gran desafío, es con quien voy a hacer mi alianza y para qué. Eso es parte de una estrategia de un Uruguay inteligente”, calificó.

En tanto, la Coordinadora de la Unidad de Cooperación Internacional, Verónica Muselli, dijo que esta estrategia responde a la globaliación del conocimieto, lo que los ha obligado a desarrollar un plan más cohesivo y profundo desde el accionar institucional. “Hoy apostamos a la calidad, estamos trabajando en ese sentido”, aseguró.

Dentro de los principales objetivos se encuentra el mantener una fuerte y activa  vinculación con los actores principales de los sectores ciencia, tecnología e innovación a nivel regional.

En este sentido, Muselli destacó el trabajo que viene llevando INIA en conjunto con  otros institutos de investigación agropecuaria de Argentina, Brasil, Chile y Paraguay, y calificó a la región como de un potencial enorme, tanto científico como de abastecimiento de alimentos. Gracias a esto, INIA puede acceder a una red compuesta por 4.200 investigadores y 70 centros de investigación, algunos de los cuales son destacados a nivel global.

Asimismo, dentro de los objetivos se encuentra el posicionamiento de Uruguay frente a un sistema multilateral de comercio, a través de la generación de tecnologías que aseguren un creciente acceso a mercados, así como también una creciente producción de alimentos frente al aumento de la demanda a nivel mundial, con criterios de conservación de los recursos naturales y del cuidado del medio ambiente.

Innovación en soja

Por otra parte, el gerente de Innovación y Comunicación del INIA, Miguel Sierra, señaló que el organismo lanzó este año tres materiales nuevos de soja que obtuvieron un importante desempeño y alcanzaron un promedio de chacras que han superado los 3.500 kilos por hectáreas, llegando en ocasiones puntuales a más de 4.500.

Los materiales están por encima del promedio de Evaluación Nacional de Cultivares, y tienen alta estabilidad y rendimiento, así como también buen comportamiento sanitario. Asimismo, según señaló Sierra, son resistentes al glifosato, están adaptadas a las condiciones de Uruguay y tienen un alto comportamiento productivo, algo que era solicitado por los productores.

Para Sierra,  Uruguay tiene que apostar a jugar en cadenas de suministro de alimentos de alto valor agregado, integrándose a través de redes con aliados y socios estratégicos, como lo es el Grupo Soja,  conformado por el organismo y seis cooperativas.

Estos materiales tienen como objetivo alcanzar en la próxima zafra un 5% más del área sembrada del cultivo con instrumentos de alta tecnología realizados en Uruguay y pertenecen al Programa de Mejoramiento de Soja, reestablecido en 2011.