El director del Centro de Economía, Sociedad y Empresa del IEEM, Ignacio Munyo, fue duro con la crítica hacia la presentación de los datos de Ancap. Por otra parte aseguró que Uruguay “se juega la vida en su inserción internacional” y que debe analizar su permanencia en el Mercosur.
“Donde se juega nuestra suerte” fue el nombre elegido por el director del IEEM, Ignacio Munyo, para su conferencia en la Cámara Española de Comercio en Uruguay en la mañana del pasado miércoles.
Luego de dos años de estancamiento, las gráficas del economista muestran una línea ascendente que rompe con la recta plana que se exhibía desde comienzos de 2015 hasta ahora. “Mucho de eso es gracias a la temporada turística que es de las mejores de la historia”, indicó Munyo comenzando a argumentar la afirmación que daba nombre a su ponencia.
Para graficar el estado de situación actual, Munyo se refirió a la venta de los automóviles que evidencian el estado de ánimo de la gente. “Ahora la venta de 0km volvió a dispararse y si la gente cambia el auto está contenta”, indicó aunque advirtió que “no todo es color de rosa”.
“Si uno mira el desempleo no se nota una fuerte recuperación sino 23.000 nuevos desempleados de acuerdo a la situación anterior, a los 5 años previos a este período económico diferente”, detalló.
“Uruguay tiene que analizar la posibilidad de irse del Mercosur porque se juega la vida en inserción internacional”
Por otra parte, se refirió a la importación de bienes intermedios, aquellos productos o materiales que importan las empresas para producir que resulta un indicador importante del estado de la economía. “Tuvo una gran caída y ahora su recuperación es lenta, mucho más que la venta de autos”, explicó.
En el mismo sentido se orienta la confianza de los consumidores que si bien “salió del pozo”, no se termina de consolidar un estado de ánimo de optimismo o recuperación. “Y jamás hay que subestimar a la opinión pública”, esgrimió.
Ancap sin festejos
“Se han conocido los datos de Ancap de una ganancia de US$ 15 millones en el 2016 y no puedo dejar pasar que se festeje como un gran logro”, exclamó Munyo y se preguntó qué pasaría si Ancap tuviera que comprar el petróleo “a US$ 100 en vez de a US$ 50”. “Es un cálculo muy simple, compra 17 millones de barriles al año. En el 2014 lo tuvieron que pagar US$ 100, hoy tienen que pagar US$ 50, con un dólar que estaba a $24 y que ahora está a $30. Hubo una reducción de costos de US$ 550 millones por año solo por este diferencial”, indicó Munyo.
“El flujo de caja que le da Ancap al Ministerio de Economía es positivo pero si tuviera que pagar el petróleo a ese precio y mantener la estructura actual sin subir más el combustible, tendríamos una pérdida de US$ 800 millones” señaló y retrucó: “Cuidado con cualquier comentario positivo porque a mí los números me dan prácticamente lo mismo”.
Asimismo refiriéndose al combo de empresas públicas, Munyo señaló que hoy en día se está utilizando “un shock tremendamente positivo para financiar el gasto público y para cerrar el balance de Ancap”.
Factores internos y externos
Munyo explicó que tan solo un tercio de las variables que condicionan el PIB del país se definen con variables internas. “Siempre importa y mucho lo que sucede afuera” apuntó y detalló: “El 65% de las variaciones del PIB se definen por factores externos”.
Entre los factores internacionales más relevantes, el director del IEEM resaltó la tasa de interés de la reserva federal y aseguró que aunque este valor se incrementó como se esperaba no subirá más que un 4%, lo que representa buenas noticias para Uruguay.
Sin embargo, Uruguay presentó desde 2006 hasta ahora ingresos cinco veces más altos a los que acostumbraba el país históricamente. “Esto explica todos los avances del país. Teníamos 3.000 millones de inversión y ahora tenemos 1.000 y casa vez es más complicado atraer inversores”, reflexionó.
Munyo opinó que para poder crecer, o mantenerse, es necesario redoblar la apuesta en lo que refiere a acaparar inversiones extranjeras. “Todo lo que vaya en contra de conseguir inversiones debe desaparecer”, esgrimió.
Perspectivas
Carne, lácteos, soja y celulosa siguen siendo los cuatro grupos fundamentales que exporta Uruguay al mundo. En lo que refiere a precios internos, según Munyo, Uruguay aún se encuentra un 25% más caro que Brasil lo que se condice con una menor competitividad.
Munyo hizo hincapié en las bondades de Uruguay ante los ojos del mundo y resaltó que el país se pondera como un mercado de poco riesgo y estable. “Estamos bien en cuanto a liquidez internacional y el sistema financiero está muy sólido”, resaltó.
El gran desafío para los tiempos que vienen se encuentra en la productividad, en conseguir nuevas inversiones pero también en mantener a raya la inflación que aún se encuentra en el entorno del 10%; algo que según Munyo ha sido más sencillo hasta el momento por el tipo de cambio bajo, escenario que tiende a cambiar.
“El dólar va a empezar a subir y se va a empezar a jugar el partido en serio en controlar la inflación. Es un desafío controlar la inflación con el dólar alto, si fue más fácil hasta ahora es porque el dólar estaba abajo. Y a fin de año estará en el entorno de los $31”, puntualizó.