El presidente de la Comisión de Expertos en Seguridad Social, Rodolfo Saldain, aseguró a CRÓNICAS que en el sistema previsional persiste una fuerte heterogeneidad. “Cada peso rinde muy diferente según el sistema al que la persona aporte”, explicó y señaló que este es un desafío muy importante que se debe afrontar junto con los cambios en el mercado de trabajo y la dinámica demográfica, entre otros.
El pasado miércoles, el presidente de la Comisión de Expertos en Seguridad Social (CESS), Rodolfo Saldain, entregó el informe de diagnóstico sobre el sistema previsional uruguayo a la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón y al prosecretario de la Presidencia, Rodrigo Ferrés.
El documento fue aprobado el pasado viernes 19 de marzo con 10 votos de 15. Los cinco votos en contra corresponden a los representantes en la comisión del Frente Amplio, el Pit-Cnt y la Organización Nacional de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (Onajpu).
En diálogo con CRÓNICAS, el presidente de la CESS, Rodolfo Saldain, aseguró que tras la entrega del informe le queda “la sensación de haber hecho un trabajo muy intenso y muy bueno”.
“Uruguay cuenta con un documento que es una hoja de ruta para futuros cambios como no había habido antes, tanto por la amplitud de los temas tratados como por la profundidad con que se trató. Realmente creo que se cumplió una etapa muy importante, preparando esta que empezamos ahora”. La etapa de propuestas, que sucede a la de diagnóstico, ocupará a la CESS a partir de la primera semana de abril.
Las conclusiones
Con esa hoja de ruta en la mano, el presidente de la Comisión asevera que lo más desafiante a futuro son las dificultades que van a surgir, y que ya se están viendo, para poder mantener algunas de las grandes fortalezas que tiene el sistema. “Por ejemplo, la cobertura de los trabajadores en actividad, dado los cambios que avizoramos en el mercado de trabajo”, comentó.
Saldain hizo hincapié también en los cambios que vienen asociados con la dinámica demográfica. “Uruguay es un país envejecido en la región, pero la velocidad de ese envejecimiento se viene acentuando en los últimos años”. Eso implica que “las generaciones que estén activas en 15,20 o 30 años van a tener que hacer un esfuerzo cada vez más grande para financiar a una población cada vez mayor”.
“Eso es un desafío realmente muy grande, que tenemos que contemplarlo en las opciones que tenemos por delante”, aseveró el presidente de la CESS.
Asimismo, en el informe aparecen aspectos vinculados con la propia lógica que tuvo el desarrollo del sistema en donde se detectó una fuerte heterogeneidad, pluralidad de instituciones y regímenes. “Cada peso rinde muy diferente según el sistema al que la persona aporte”, explicó Saldain, este también es un desafío importante dado que “hay reglas de juego muy diferentes” según estimó el experto.
Por otro lado, el documento destaca que las instituciones no estatales tienen dificultades de diferentes características, pero “todas relevantes”. En este sentido, el presidente de la CESS indicó: “Necesariamente hay que tener una visión global de la reforma” y apuntó: “En el caso del sector militar ha quedado evidenciado que la reforma de 2018 tuvo carencias importantes, que dejó aspectos sin resolver de relevancia, probablemente porque no tuvieron toda la información de base en aquel momento que ahora sí tenemos en virtud de lo que logramos avanzar y acordar con el Ministerio de Defensa de acceso a la información”.
En contra
Consultado acerca de los cinco votos en contra del documento final, Saldain señaló que se remiten a “un posicionamiento político basado en razones que escapan a lo técnico”. En esta línea apuntó que es razonable que una fuerza de oposición que quiera mantener la autonomía en un proceso difícil.
Las claves del diagnóstico
- La dinámica demográfica del país genera presiones tanto en los sistemas de beneficio definido (BPS y demás subsistemas estatales y personas públicas no estatales) como en los de cotización definida (AFAP y empresas aseguradoras)
- El mercado laboral está siendo objeto de cambios cuyos impactos aún son difíciles de evaluar.
- Los cambios demográficos y laborales hacen aconsejable repensar los mecanismos de protección social en la tercera edad, particularmente para los sectores más vulnerables.
- La heterogeneidad de derechos y obligaciones entre los diferentes regímenes, incluso al interior del BPS, significa que cada peso aportado genera beneficios de diferentes cuantías y características, según el sector del que se trate.
- Todos los regímenes previsionales vigentes en el país, incluso los recientemente reformados, presentan debilidades, tales como desequilibrios actuariales, rendimientos desiguales y problemas de sustentabilidad de diferente entidad.
- El gasto público previsional alcanzó a 11,1% del PIB1 en 2019 (9,2% corresponden al BPS, 1,2% al servicio de retiros militares, y 0,7% a retiros policiales). Sin un cambio en los parámetros, se proyecta que esta cifra llegue a 13,5% en 2070 (11,6%, 1,0%, y 0,9%, para BPS, militares y policial respectivamente). Son valores altos en la comparación internacional.
- La edad mínima de acceso a las jubilaciones no ha acompañado las ganancias en esperanza de vida y se ha mantenido estable en las últimas décadas.
