Uruguay reconfigura su matriz exportadora lanera hacia China, que representa un 43% del total

Desafíos y oportunidades del sector lanero frente a la volátil economía global

Con la economía mundial convulsionada, el sector lanero uruguayo experimentó un aumento en las exportaciones en 2024, ​alcanzando los 46 millones de kilos vendidos y su mayor comprador pasó a ser China. En diálogo con CRÓNICAS, Josefina Sanguinetti, responsable de Mercados y Proyectos del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), profundizó en el tema y destacó que en el primer trimestre del 2025 hubo un alza de los envíos al exterior del 7,5% frente al mismo período del 2024. Sin embargo, señaló que los precios mantienen una tendencia decreciente respecto a niveles prepandémicos a escala global.

El sector lanero uruguayo ha sido un elemento fundamental en la economía nacional desde hace al menos dos siglos. Por supuesto, este ha variado con el tiempo; sin irnos muy lejos, entre 2018 y 2020 atravesó una transformación significativa. Como explicó Sanguinetti, durante dicho período la demanda mundial de lana retrocedió, y de la mano de esa retracción, también los precios sufrieron una caída. Únicamente en 2021, como efecto postpandemia, el valor de la lana aumentó levemente, pero rápidamente volvió a la senda de la baja. En ese momento, determinadas categorías de lana llegaron a costar la mitad del precio que valían en 2018. 

“El precio de la lana siempre está bastante ligado al estado de la economía mundial. En estos últimos años, muchos acontecimientos sacudieron e impactaron la economía global. Por ejemplo, la guerra comercial entre Trump y China que se originó en 2018-2019, la pandemia, y las guerras como la de Rusia y Ucrania. Fruto de esto, el precio de las lanas cayó”, afirmó la ejecutiva. 

Exportaciones en alza 

A pesar del descenso de los precios, las exportaciones de lana crecieron un 59% durante el 2024 en comparación con el 2023 y alcanzaron un récord. La representante del SUL señaló que el rubro vendió al exterior 46 millones de kilos el último año, mientras que el año anterior, se estimaba que 47 millones de kilos habían sido guardados por los vendedores, quienes decidieron retener la fibra ante los precios desfavorables. A su vez, en el primer trimestre de este año, la lana exportada experimentó un alza del 7,5%, contrastado con el mismo período del año pasado. 

Como explicación de dicho crecimiento, mencionó que la principal causa fue el cambio que se dio en 2024 en la matriz exportadora uruguaya. Hasta ese entonces, la lana peinada era el producto estrella en las ventas al exterior, principalmente a Europa. Sin embargo, luego la lana sucia con destino a China tomó su lugar, con un crecimiento del 77%. Así, China se consagró como el principal destino de las exportaciones de lana uruguaya, representando un 43% del total, seguido de Italia con un 12%.

“La lectura que se hace es que en 2024 China ya había salido finalmente de todo lo que implicó el covid 19, y en la búsqueda de reactivar su economía, vuelve a poner en marcha todas sus fábricas. Por ende, necesita una mayor oferta de empleo. Como medio de lograr este objetivo, empezó a comprar mayoritariamente lana sucia para poder hacer su lavado y peinado en sus propias fábricas”, explicó.

¿Qué se puede esperar ante la incertidumbre del comercio global?

Sobre las expectativas del SUL, su responsable de Mercado y de Proyectos señaló que, debido a los nuevos aranceles colocados por Trump y la volatilidad en los mercados del norte global, de crucial dependencia para el rubro, no es posible tener certezas al respecto. 

También añadió que “los aranceles impuestos por Trump generaron caídas en las bolsas y monedas a escala mundial e impactaron al mercado lanero, donde nos guiamos por el Indicador de Mercados del Este (IME) de Australia, nación que encabeza la exportación lanera mundial. En las dos primeras semanas de abril, el IME en moneda australiana subió, pero debido a su devaluación, su valor en dólares descendió. Sin embargo, la caída no se debió a una menor demanda, sino a la volatilidad cambiaria. De hecho, se vendió el 95% de la lana ofertada en Australia, con compradores chinos activos. Además, en la tercera semana del mes, el indicador disminuyó en su moneda local, pero aumentó en dólares. Esto demostró cierta inestabilidad, pero no un desplome del mercado». 

Desafíos y ventajas del mercado lanero nacional 

Sanguinetti dijo que, a nivel local, la producción ovina puede llegar a ser una inversión muy rentable, frente a la inversión que se necesita, que además es un excelente complemento en los campos junto con la ganadería vacuna. No obstante, el rubro posee dificultades como cualquier otro, y entre ellas nombró el abigeato, los depredadores y la falta de mano de obra capacitada. Expresó que este último ha disminuido con las décadas y que una de las causas es la urbanización e ida de la población de las zonas rurales a las ciudades. Al mismo tiempo, no olvidó remarcar la dependencia de las potencias económicas que vuelve a los exportadores uruguayos en price takers (tomadores de precios). 

Pese al contexto internacional vacilante y a la caída de precios, la ejecutiva relató que los principales exportadores del rubro mantienen una perspectiva optimista. Según sus declaraciones, las fábricas globales modificaron su estrategia tras la pandemia: abandonaron el acopio de stock anual para operar directamente sin reservas. Este cambio se tradujo en una demanda constante que beneficia a los laneros uruguayos, aportándoles estabilidad frente a las compras que históricamente solían ser más intermitentes.