La normativa que establece que la conexión a internet sea gratis a todo el público es, desde el lunes 11 de junio, cosa del pasado en Estados Unidos. De acuerdo con Marcelo Montado, vicepresidente de la Cámara de Economía Digital del Uruguay, esto es un “problema enorme” aunque no cree que Uruguay imite esta medida.
Por Ignacio Palumbo | @ignacio_palumbo
En líneas generales, el principio de neutralidad de la red refiere a que todos los usuarios puedan entrar a cualquier página y acceder a sus contenidos sin que su conexión se vea afectada por terceros.
Marcelo Montado, vicepresidente de la Cámara de Economía Digital del Uruguay (CEDU), bajó este concepto a tierra: “es como que a determinadas empresas que distribuyen determinado producto se les cobrara un peaje diferente o más patente por usar las calles”.
¿Quién querría ponerle fin a la democracia virtual? La respuesta: las empresas de telecomunicaciones estadounidenses; por ejemplo, Comcast, AT&T o Time Warner Company. Son estas las que se ven más beneficiadas por el fin de la neutralidad de la red, ya que obligarían a las empresas a que les paguen para distribuir su contenido (que hasta ahora era gratuito) de forma regular. Esto también afecta negativamente a las pequeñas empresas y emprendedores emergentes, ya que las compañías de telecomunicaciones le darán más importancia a quienes les paguen más.
Montado explicó a CRÓNICAS que “por ahora” esta medida no repercute directamente en Uruguay aunque sí podría hacerlo de forma indirecta. “Cualquier usuario del mundo, si el enlace de donde está conectado pasa por un operador que restringe o ralentiza el tráfico se pueden ver afectados”.
Es decir, que si el operador del sitio web al que se ingresa tiene su base en Estados Unidos, se podría ver afectado por este cambio de normativa, sin importar en qué lugar del mundo esté el usuario/consumidor.
Montado: “No me imagino a Uruguay votando una ley que privatice el acceso a internet”.
Al ser consultado sobre la posibilidad de que Uruguay replique esta medida dentro de su territorio, el vicepresidente de CEDU opinó que esto no será así, refiriéndose a la “cultura y tradición” de democracia y acceso igualitario que prima en el país.
“No me imagino a Uruguay votando una ley de este tipo que claramente no defiende los derechos de todos (…) no deja el acceso libre y la capacidad de competir a cualquier empresa, sino que a las que puedan hacer algunos acuerdos con las telefónicas. Entonces no me lo imagino y también espero que no lo hagan”, concluyó.