Finalizado el primer semestre de 2023, la Asociación del Comercio Automotor del Uruguay (ACAU) divulgó el informe del mes de junio, en el que se puede apreciar, en comparación interanual, un incremento del 26,7% en las ventas de autos. Ante esto, CRÓNICAS consultó a Ignacio Paz, gerente general de ACAU, quien afirmó que la sequía es una “preocupación” en las proyecciones para el segundo semestre del año.
Según el informe presentado por ACAU, en el mes de junio la industria automotriz tuvo un importante crecimiento en comparación interanual, con un total de 5.178 vehículos vendidos en todo el territorio.
Las ventas de este mes, comparadas con las de junio de 2022, arrojan un aumento del 26,7% y un incremento del 10,9% si se compara con las unidades comercializadas en mayo de 2023, que totalizaron 4.914 ventas.
Ante esto, Ignacio Paz manifestó que “cuando uno compara un mes con el otro, hay muchos factores que pueden haber influido, para bien o para mal, que tal vez no arrojen lo que es el mercado, por eso nosotros siempre miramos períodos más largos, como es el semestre”.
En este sentido, agregó que pueden existir causas que expliquen un cambio “tan importante”, pero si se observa el semestre, “los resultados arrojan que estamos un 4% por encima del semestre del año pasado”, lo que es “más relevante” respecto de lo que está pasando en el mercado.
En lo que respecta a segmentos, se comercializaron un total de 2.023 automóviles, siendo el más destacado, seguido por los utilitarios, con 1.823 unidades vendidas, y los SUV, con 1.065 unidades.
Según estos números, en el primer semestre de 2023 se comercializaron 27.264 unidades nuevas, lo que significa un “rendimiento positivo y alentador” en el mercado.
Preocupaciones y proyecciones del sector
“Desde el sector lo que miramos con preocupación son los efectos de la sequía, lo que puede producir en la economía en general y cómo eso repercute en el sector, por lo tanto, ese es el foco de alerta”, señaló al respecto el titular de la ACAU.
Otro de los factores que preocupa al sector es el dólar, uno de los aspectos “más determinantes” en el mercado, si se tiene en cuenta el comportamiento inversamente proporcional, dado que, si sube el dólar, baja el mercado y viceversa.
“Hay que ver cómo se desarrollan estos focos de alerta, que pueden implicar que no haya el mismo crecimiento que en el primer semestre o tal vez se observe una caída que haga que lleguemos a un año muy parecido a lo que fue el 2022”, remató el entrevistado.