Esta mañana en el Club de Golf se realizó un desayuno de Ceres que tuvo como único expositor al director ejecutivo de la organización, Ignacio Munyo. Tras un amplio recorrido por la actualidad mundial y puntualizando en los países vecinos, analizó la situación del país y los desafíos a futuro.
En la ocasión, el ejecutivo destacó la gran oportunidad que se abrirá durante 2023, cuando España asuma la presidencia de la Unión Europea (UE).
“No hay voluntad política en Europa para avanzar, pero salta la guerra; aparece toda la inseguridad alimentaria y energética y la UE vuelve a mirar al Mercosur”, dictaminó.
Además, destacó la potente estanflación de Brasil y las desfavorables perspectivas de Jair Bolsonaro, actual presidente de este país, para una reelección.
Y, por su parte, mencionó a Argentina, con una gran desaceleración económica y una caída importante en su confianza empresarial y más de 70% de inflación proyectada a fin de año. “Para aprovechar este contexto muy favorable por los precios internacionales, está haciendo todo lo contrario. Le está aumentando las retenciones al trigo, poniendo impuestos a ganancias extraordinarias de empresarios, todo lo que no habría que hacer”, diagnosticó.
En este contexto, Munyo expresó que, según indican proyecciones a nivel macro, este año la economía uruguaya crecerá por encima del 4,5%; “va a crecer más que China”, puntualizó.
Por esta línea, este crecimiento se asienta en tres sectores: la recuperación del turismo, el sector agroindustrial con precios internacionales muy favorables y las obras de construcción asociadas a la tercera planta de celulosa.
“Fundamentalmente la industria agroexportadora está impulsando el crecimiento, tanto mirando el total como el núcleo, está un 10% arriba de los niveles prepandemia con un personal ocupado y horas trabajadas que no alcanzan esos niveles. De hecho, el total de horas trabajadas es 5% menor, lo que habla de un proceso silencioso de ganancia de productividad y automatización de muchas tareas”, explicó.
En otro orden, advirtió acerca del futuro del trabajo, las relaciones laborales, las reformas que “tiene pendiente” el país —en referencia a la educativa y a la de seguridad social—. No obstante, destacó que la administración actual ha logrado frenar la trayectoria ascendente de la deuda pública.
En suma, recordó que el punto central en esta situación es la inversión, y agregó que en este momento Uruguay está recibiendo un buen nivel de inversión, principalmente por UPM 2.
“Si comparamos la inversión actual de Uruguay, la de 2020 o la del promedio de los últimos diez años, con un grupo de países que tienen ingreso anual parecido al nuestro -entre US$ 10.000 y US$ 20.000 per cápita-, invierten casi 5% más del PBI. Uruguay necesita inversión para lograr avanzar”, aseguró el experto.
Leé la información ampliada en la edición semanal de CRÓNICAS el próximo viernes.