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Suba de impuestos: “Orsi sabía que estaba prometiendo algo que muy probablemente no iba a poder cumplir”
Fecha de publicación: 19/09/2025
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Andrés Ojeda, senador del Partido Colorado

Un presupuesto “muy alejado de la gente” que recorta en “áreas clave” y que aumenta el gasto “pidiéndoles a los Reyes Magos el crecimiento”, es la visión que tiene Ojeda sobre el proyecto de Ley de Presupuesto Quinquenal. En entrevista con CRÓNICAS, el senador colorado fue consultado sobre las declaraciones de Oddone, quien le pidió a la oposición que “eleve el nivel intelectual” de la discusión presupuestal, y contestó que ellos elevarán el nivel “apenas él baje la soberbia”. Por otro lado, fue crítico con las medidas impositivas incluidas en el articulado y aclaró que no descartan no votar el presupuesto.

Por Mateo Castells | @teocastells


Menú: El entrevistado degustó en la cava de La Corte corvina a la mediterránea con puré de calabaza y zanahoria, que acompañó con agua sin gas.


-¿Cómo evalúa, de manera global, lo presentado en la Ley de Presupuesto?

-En particular, creo que es un presupuesto complicado para Uruguay. Primero, porque se incumplen directamente promesas de campaña. El no aumentar impuestos y los 2.000 policías son las más grandes. Entonces, ese golpe de credibilidad es malo. Ni siquiera digo al presidente, digo al gobierno en general. A su vez, en la Rendición de Cuentas le pegan con un caño al gobierno anterior, acusándolo de carnaval electoral de gasto en el 2024 y es ese gasto que se toma de base para el quinquenio, agregándole, incluso, unos cuantos millones de gasto más arriba. Evidentemente, es un presupuesto que aumenta el gasto, que dice que lo va a financiar con un crecimiento que en ningún lado sale que ese será el crecimiento que vamos a tener. En definitiva, es aumentar el gasto, pidiéndoles a los Reyes Magos el crecimiento. Es preocupante verlo en estos términos. Este termina siendo un presupuesto muy alejado de la gente, que recorta un poquito en áreas clave como la seguridad y la educación.

-¿Cómo tomó las declaraciones de Oddone de que la oposición debería levantar el nivel intelectual?

-No tomé muy bien la afirmación de Oddone. Francamente, le contestaría a Oddone que nosotros levantaremos el nivel intelectual apenas él baje la soberbia. A Gabriel Oddone le tengo un respeto de toda la vida y está todo bien, y creo que la discusión no es con él, es básicamente con el gobierno y con quienes pidieron el voto en base a ciertas premisas que hoy no están cumpliendo. El rol de Oddone hoy es más de asesor técnico que de dirigente político. Ahora, si hace comentarios como este y entra en la arena política, ya no tiene las credenciales técnicas que él tiene en su rol técnico. No es lo mismo. Por esa razón, le aconsejaría humildemente que siga en el rol técnico, que es el que mejor le sale. 

-¿Qué postura va a adoptar el Partido Colorado (PC) con las modificaciones impositivas incluidas en el presupuesto?

-Primero vamos a escuchar a todas las delegaciones que van al Parlamento y después tomaremos una decisión. A priori, en las primeras conversaciones hay bastante unanimidad en que no estamos a favor de que estas propuestas se aprueben. Quizás, lo que generó más ruido, como pasa siempre, son algunas normas no presupuestales. Por ejemplo, la que le da superpoderes a la DGI. Darle superpoderes a la DGI no es una norma presupuestal. Y el argumento que ellos usan, para meterlo en el paquete, es el no incumplir normativas y reclamos internacionales. Yo creo que eso no es del todo cierto, pero si fuera cierto, no lo meten en el presupuesto y lo mandan como una ley común, a los efectos de que se estudie como corresponde. Meterlo en el presupuesto quiere decir meterlo exprés. Esta es una norma exclusivamente recaudatoria. Quieren darle poderes a la DGI para que salga a cobrar como pueda, porque si no se consolida el crecimiento real, van a necesitar plata, y van a mandar a la DGI a buscar plata, como sea. Y para ello, le quieren dar superpoderes ya, que van a perjudicar más a los pequeños, no al “malla oro” que está acostumbrado a discutir con la DGI, porque tiene estructura y espalda. La respuesta por saber de antemano que no se va a crecer al ritmo que se plantea, no es salir a hacer una razia con la DGI.

-¿Cómo está hoy el relacionamiento en la Cámara Alta entre oposición y oficialismo, luego de varios encontronazos que han sucedido, principalmente luego de la interpelación de Fratti?

-A partir de que el Frente Amplio (FA) decidió retirar su solicitud de responsabilidad del artículo 115 con Sebastián da Silva, se descomprimió el mal tono de la discusión y volvimos a la coordinación del Senado, obviamente con la tensión natural después de un episodio donde los coordinadores entienden que se incumplió la palabra. 

-Se llega a la discusión presupuestal, en definitiva, en buenos términos. 

-Ni la peor, ni la mejor. Nadie de nosotros es responsable de dejar o no sin presupuesto al gobierno; es el gobierno que, si no negocia bien, se deja a sí mismo sin presupuesto. Nosotros no descartamos no votar el presupuesto. Veremos al final qué pasa.

-¿Cómo definiría la postura que ha tenido la oposición a lo largo de estos meses? El FA los ha acusado de ser una oposición virulenta y de ir al trancazo…

-Al lado de ellos, somos bebés de pecho. El FA, a 15 días de la pandemia, caceroleaba. No ha habido oposición más incendiaria que el FA. Nosotros hemos sido bastante más responsables y constructivos. 

-Desde el gobierno se ha argumentado que lo planteado en la ley presupuestal responde a la necesidad de recaudar más, teniendo en cuenta la situación fiscal del país. A fin de año se proyecta que el déficit alcanzará el 4,5%, una situación que en campaña el actual oficialismo no preveía. ¿Cuál hubiese sido la postura y las propuestas del presupuesto si ustedes eran gobierno? 

-Uno es rehén de sus palabras y esclavo de sus silencios. El actual presidente de la República en el debate con Delgado miró a la cámara y dijo que no iba a subir los impuestos. No dijo que no iba a subir impuestos, salvo que el déficit no sea el que tenemos hoy. No hubo un disclaimer de letra chica. No se puede poner la letra chica del contrato después de que se firma el contrato. Si le decís a la gente que no se van a subir los impuestos, no se suben y listo. Un imponderable extremo es una pandemia, que es como que caiga un meteorito. Ahora, que haya una divergencia entre las previsiones y lo que ocurra a futuro con el déficit, no es una pandemia. Obviamente debe haber estado barajado como una opción entre los economistas de alto fuste que tiene el FA. Escudarse en eso para incumplir una promesa que no tenía esta condición, no salva del incumplimiento. Agarrarse de eso para echarnos la culpa de su propio incumplimiento, es un acto de deslealtad importante.

-¿Usted qué hubiera hecho ante este escenario?

-Si nosotros prometimos no subir impuestos, no los subíamos. Acá hubo una pandemia y no se subieron los impuestos.

-Se aumentó el IVA, cuando se redujo a la mitad la devolución de este impuesto mediante pagos electrónicos.

-Bueno, pero en general. Y después ese IVA se bajó. No hubo una suba correlativa en la necesidad de dinero. Se les cobró una plata a los funcionarios públicos por un tiempo corto y estamos hablando de un caso extremo, imponderable de verdad. 

-¿Y qué ocurre, ante este panorama al que usted se refiere, con los gastos postergados de la anterior administración y las erogaciones presentadas en la Rendición de Cuentas? Hablo de la deuda de ASSE, el pago al consorcio del Ferrocarril Central, el fideicomiso de vivienda.

-Evidentemente es un caso a caso y está bastante discutido entre el gobierno anterior y el actual, sobre si son tales, si tienen esa magnitud y ese origen. Hay dos relatos contrapuestos muy claros. 

-Pero son relatos que están incluidos en la Rendición de Cuentas que fue aprobada en ambas cámaras.

-Con los votos de ellos. La Rendición de Cuentas se aprobó, en buena parte, con los votos de todos y una parte con votos de ellos y de Cabildo. Obviamente, la Rendición en general de lo que fue el gasto del gobierno anterior se votó, como se vota siempre. Ahora, todas estas cosas son previsibles y son las razones por las que el propio Oddone dijo que era irresponsable prometer esa no suba de impuestos. Orsi sabía que estaba prometiendo algo que muy probablemente no iba a poder cumplir. En los contratos en general, las únicas razones que permiten el incumplimiento son las razones de casos fortuitos o de fuerza mayor. El político, cuando va a una elección, hace un contrato con la gente, se obliga a cosas y pide un voto a cambio, pero la gente no le puede retirar un voto que ya le dio. Acá el gobierno incumple el contrato que firmó con la gente, basado en letra chica que le puso después de firmar, no antes. A mí no me pueden imponer un incumplimiento contractual posterior a firmar, con condiciones que se agregan después.

-¿Sería responsable y creíble decir que si la coalición ganaba la elección del año pasado no hubiera aumentado impuestos en el presupuesto?

-Yo creo que hubiéramos cumplido. Si nos hubiera tocado gobernar a nosotros con un equipo económico conformado por Luis Mosca, Julio de Brun, Isaac Alfie y Miguel Vieytes, no cabría ninguna duda de que hubiéramos cumplido, porque esa gente no me hubiera dejado incumplir una promesa de estas características. 


“Creo que hay una sobredimensión desde afuera de una situación que es natural en los partidos”

-¿Cómo está hoy la interna del PC?

-Bien. Creo que hay una sobredimensión desde afuera de una situación que es natural en los partidos, que es la de que haya más de un grupo y que trabajen en conjunto. Sanguinetti me decía, cuando íbamos al velorio de Mujica, que cuando a él le tocó liderar, el resto del partido estaba compuesto por Batlle, Tarigo y Pacheco. “Vos vas en coche”, me dijo. El mensaje de Sanguinetti es que siempre ha habido multiplicidad de liderazgos fuertes dentro del partido y los sigue habiendo.

-¿Está cómodo con Bordaberry en el partido y en el Senado?

-Yo estoy cómodo con todos los compañeros, no siempre estamos de acuerdo en todo y la clave no es evitar los conflictos, sino tener maneras sanas de dirimir los conflictos. 


“Es responsabilidad nuestra mantener los vínculos sanos”

-¿Qué opina de la actitud que han tenido Álvaro Perrone y Cabildo Abierto desde marzo? 

-Yo lo desdramatizo bastante. Si partimos de la base de que Cabildo Abierto a veces votaba distinto de la coalición, integrando el gobierno de la coalición, ¿por qué nos sorprenderíamos de que, no estando en el gobierno, vote cosas distintas a lo que votamos nosotros? Ni Manini ni Perrone han descartado participar electoralmente con la coalición en la próxima elección.

-Pero ¿no hay un desgaste en la relación de cara a las próximas elecciones?

-Mientras se mantengan las relaciones humanas sin demasiado desgaste, todo es dinámico y se puede estar en todos lados. Por eso, es responsabilidad nuestra mantener los vínculos sanos. 


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